Kush Maini se quedó parado en la largada de la carrera larga y todo terminó con una impactante carambola, que incluyó un vuelco en plena recta principal del trazado de Azerbaiyán.
Por un instante, la respiración de todos se entrecorta en Bakú. Las luces del semáforo se apagan y la carrera feature de la 12ª fecha de la Fórmula 2 se pone en marcha. Un auto amarillo se queda plantado en su cajón de partida, Joshua Duerksen lo esquiva con lo justo. Detrás de él, varios competidores se abren a puro volantazo, pero llega el brutal impacto. Oliver Goethe embiste violentamente el auto del equipo Invicta y, detrás, Pepe Martí levanta vuelo y vuelca.
La roja sale de inmediato y la transmisión oficial evita mostrar las imágenes. Tras un puñado de segundos que parecen una eternidad, se ve a Maini de pie, apoyado en el paredón de boxes, charlando con un médico. La tranquilidad llega a la pista de Azerbaiyán, todos están bien. Pero el accidente fue bestial.
Trozos de auto por todos lados, el motor del auto del equipo Invictus del indio casi arrancado. El Campos del español Martí que quedó sobre sus ruedas, tras el vuelco. Y Goethe, con el auto que era de Colapinto en el equipo MP, tirado a un costado. Destrucción total en algunos casos, fuertes roturas en otros y los pilotos que deben pasa por el centro médico para un lógico chequeo.
Vuelven a respirar todos. Casi 40 minutos demoraron los auxiliares de pista en limpiar la zona minada de destrucción y los autos de F2 vuelven a pista. Los comisarios de la FIA deciden que el relanzamiento sea en movimiento, como para evitar que se repita la escena. La acortada carrera de la telonera se pone en marcha. El susto pasó.