SEATTLE -- El pateador de los Seattle Seahawks, Blair Walsh, indicó que los gestos hacia la banca de los Minnesota Vikings el viernes por la noche fueron resultado de las burlas en su contra por parte de sus ex compañeros.
"Sentí que no era nada que fuera serio o tuviera que ser hiriente, pero quería hacerles saber que eso no iba simplemente a acabarse", declaró Walsh. "No dije nada. Sólo los vi".
Walsh convirtió un par de goles de campo de 52 yardas en la segunda mitad, y después de cada uno, hizo gestos hacia la banca de los Vikings. Luego de la segunda patada, el esquinero Richard Sherman corrió hacia el campo para expresar su aprobación.
Cuando se le preguntó qué le decían los Vikings, Walsh respondió, "Nada que pueda repetir aquí. Eso es un hecho".
Walsh jugó cinco temporadas en Minnesota antes que el equipo lo cortara en noviembre. Firmó con los Seahawks como agente libre esta temporada baja.
"Simplemente respondí a ser provocado", sentenció Walsh. "No dije nada. Cuando tienes a tipos que fueron tus compañeros por cinco años gritando cuando estás tratando de patear, es extraño. Y espero que lo hicieran en broma. Y espero que no haya sido en serio porque no hice nada en serio, pero definitivamente no salió de la nada".
El entrenador en jefe de los Seahawks, Pete Carroll, agregó: "Estoy emocionado por Blair. Le hicieron pasar un mal momento. Le estaban gritando y todo eso. Él se estaba divirtiendo con eso. Es realmente un buen competidor. Me gusta su mentalidad y creo que somos muy afortunados por tenerlo".