Thomas Hitzlsperger tuvo una carrera notable como futbolista durante 12 años, en los que vistió las camisetas de seis clubes. El nivel mostrado en sus actuaciones con Aston Villa, Stuttgart, Lazio, West Ham United, Wolfsburg y Everton como volante ofensivo le hizo merecedor de 52 convocatorias con la selección de Alemania, caracterizado por una feroz zurda que le hizo ganarse el apodo de "El Martillo".
Luego de retirarse del fútbol en 2013, Hitzlsperger inició su carrera como jefe deportivo del Stuttgart para convertirse posteriormente en CEO del club alemán en 2022. Desde entonces ha asumido el rol de analista, fue designado como embajador del Athletic Bilbao y ha invertido en el club danés Aalborg BK como parte de su empresa Sports Strategy Excellence 22.
Sin embargo, su legado va mucho más allá de su récord en la cancha. El 8 de enero de 2014, Hitzlsperger se convirtió en el futbolista masculino de mayor perfil en salir del clóset y revelarse como hombre gay. Hitzlsperger es una de las figuras más influyentes del fútbol y hace poco, conversó en exclusiva con ESPN sobre su decisión de salir del armario hace nueve años.
El ex mediocampista recordó el temor que sintió en aquel entonces con respecto a lo que el vestuario pensaría de él, aunque también rememoró la fuerza de voluntad que tuvo, consciente de que si hablaba francamente sobre su sexualidad otros se sentirían lo suficientemente cómodos para hacer lo mismo. También conversó sobre las historias inspiradoras de otros atletas gay como Josh Cavallo y Jake Daniels, al igual que el trabajo que falta por hacer para convertir a este deporte en un sitio más inclusivo y el apoyo brindado a los atletas miembros de la comunidad LGBTQIA+.
"El reto fundamental es seguir alzando la voz, hablando al respecto, hablando sobre la importancia de la aceptación dentro del deporte", afirma. "Eso incluye a todos. Asegurarse de que, cuando se produce un acto de discriminación, tengas claro que es algo inaceptable. Que los clubes y federaciones digan que tienen políticas de tolerancia cero a la discriminación".
(Nota del editor: La presente entrevista ha sido ligeramente editada con el propósito de aportar mayor claridad y concisión.)
Athletic Club eligió al exjugador alemán como su embajador, en una iniciativa que busca cambios sociales a favor de los futbolistas homosexuales.
Su decisión de salir del clóset y cómo fue recibida
ESPN: Thomas, en 2014 fuiste el primer futbolista masculino en declararse abiertamente gay. Cuéntanos cómo fue ese proceso. ¿Cómo fue para ti?
Hitzlsperger: No fue problema durante gran parte de mi carrera. Viví mi sueño. Jugué al fútbol y me centré en ser futbolista profesional. Sin embargo, hacia el fin de mi carrera, tenía claro que soy gay y que debía enfrentarlo: No me puedo esconder. No quiero esconderme todo el tiempo para después hacerme un montón de cuestionamientos.
¿Se lo diré al equipo, al entrenador y luego hacerlo público, o me mantendré discreto? Por eso, me tardé un par de años en decírselo primero a mi familia, después a mis amigos y luego, sentirme seguro de que estaba muy bien apoyado para luego revelarlo públicamente. Lamentablemente, no pasó mientras seguía jugando con el Wolfsburgo o después con el Everton, pero debía entender que no estaba lo suficientemente preparado para asumir la atención y la presión que eso conllevaría.
ESPN: ¿Cuáles fueron algunas de esas preguntas que te hacías en tu mente antes de tomar la decisión?
Hitzlsperger: Bueno… una pregunta fue: ¿Es realmente necesario? O sea, ¿por qué tengo que contarle mi vida privada al público? Después, la respuesta era más, no lo hago tanto por mí, sino por los demás. Como estoy bajo la mirada del público, puedo convertirme en un modelo para los demás. También pensaba: ¿qué cambiaría dentro del vestuario? ¿Qué pasaría si algunos de mis compañeros de equipo se sienten incómodos con el hecho de tener un compañero gay?
La verdad, no me preocupaban tanto los medios de comunicación o la reacción de los hinchas, porque estoy acostumbrado a las críticas siendo futbolista. Estoy acostumbrado al abuso. Es triste, pero eso forma parte de este deporte y debes asumirlo. Pero ser objeto de abuso por tu orientación sexual es una cuestión distinta. Esa era la clase de preguntas que corrían por mi mente.
ESPN: ¿Cómo te sentiste después de hacer el anuncio?
Hitzlsperger: Fue grandioso. La verdad, lo pasé muy bien porque diría que 95 porciento de las reacciones fueron positivas. Prácticamente en todas partes del mundo, la gente dijo "hiciste algo genial" o "por fin, alguien ha hablado". Y aunque no fui el primero en hacerlo en el mundo del fútbol, pero sí uno de los primeros, y la gente dijo que era grandioso que alguien tuviera el valor de hablar al respecto. Para mí, también era importante aportar algo a la conversación. En el pasado, oía a los futbolistas decir: 'Oh, no. Si hay un futbolista gay, no debería salir del clóset. Es demasiado difícil para él'. Por eso, quería aportar algo al debate que nos hiciera avanzar y no siempre dar las mismas respuestas que daban los demás.
ESPN: Saliste del clóset hace nueve años. ¿Crees que se han producido cambios importantes desde 2014?
Hitzlsperger: Sí. Así lo creo. Sé que la gente intenta corregirme y dicen: 'pues bien, nadie más ha salido del armario desde entonces, ningún futbolista de alto perfil', y les respondo que eso no es correcto. Ahora, conocemos de otros jugadores como Josh Cavallo y Jake Daniels. Y la sociedad ha cambiado también. Veo que, dentro de los clubes de fútbol, existe un mejor entendimiento y que es aceptado ser gay. Tienes más personas gay trabajando dentro de los clubes. No hablo de jugadores, sino del personal que trabaja en los clubes. Ves muchos símbolos y banderas arcoíris en los clubes: ya no sienten temor en demostrarlo y ser abiertos sobre la diversidad.
Veo muchos cambios y algunos acontecimientos positivos; aunque, claro, aún no hemos visto a una gran figura del fútbol saliendo del clóset. El reto fundamental es seguir alzando la voz, hablando al respecto, hablando sobre la importancia de la aceptación dentro del deporte. Eso incluye a todos. Asegurarse de que, cuando se produce un acto de discriminación, tengas claro que es algo inaceptable. Que los clubes y federaciones digan que tienen políticas de tolerancia cero a la discriminación".
Los problemas dentro del fútbol masculino
ESPN: Thomas, estoy de acuerdo contigo en que se ha mejorado mucho en otros deportes. Sin embargo, no llegas a percibir muchos cambios dentro del fútbol masculino con respecto a la inclusión y diversidad. Y existe una diferencia sustancial en cuanto a la aceptación de la comunidad LGBTQIA+ en comparación con otras disciplinas deportivas o el fútbol femenino. ¿Por qué sucede eso?
Hitzlsperger: Primero que todo, debemos sentirnos complacidos de que eso no sea problema en el fútbol femenino. Ellas no tienen ese problema. Sin embargo, tienen otros problemas, aunque está claro que ese no es uno de ellos, y quizás la comparación sea injusta. Pero en el fútbol masculino, existe mucha atención y hay mucho dinero invertido, y creo que eso a veces saca a relucir lo peor de la gente.
Con respecto a ser gay, puedes decidir si se lo cuentas a los demás o no. Y si eres de raza Negra, no puedes decidir si se lo muestras a la gente o no. Y creo que, por eso, a veces ser gay es una ventaja y una desventaja a la vez. Porque, si eliges esconder tu sexualidad, lo internalizas todo y eso causa estrés. Si no la escondes, pues te expones y enfrentas una discriminación similar o idéntica a la que padecen otras minorías. Y por eso, es complicado. Lo es, de verdad.
Ser abiertamente gay me ha beneficiado. Muchas personas han llegado a mi vida, personas maravillosas que no habrían llegado a mi vida de no ser por ello. Y lo sigo diciendo: miren, sé que es un paso importante. Pero una vez que lo hayas hecho, para la mayoría, evidentemente mejorará tu vida.
ESPN: Ahora que hablamos de Josh Cavallo, nos dices que cada acto de la vida diaria era una actuación, porque había que pretender, esconder y comportarse en una forma que me imagino no se sentía real. ¿Qué tan doloroso puede llegar a ser?
Hitzlsperger: Sumamente doloroso. Diría que no tuve grandes problemas durante la mayor parte de mi carrera, porque el fútbol lo era todo en mi vida. De niño, hice todo lo necesario para convertirme en futbolista profesional. Una vez que lo logré, jugué en la Premier League y la Bundesliga, etcétera. Eso era lo único que quería. Una vez me hice mayor y se me hizo evidente, mira, no hay nada que esconder, no hay excusas. Eres gay, tienes que asumirlo. Y así fue como se complicaron las cosas.
Pues, en los dos o tres últimos años de mi carrera, fue cuando pensé: mira, prefiero decírselo a mis compañeros con franqueza, pero me siento incómodo. ¿Qué voy a hacer? Y ahí es cuando todo el proceso empieza en tu mente. Y, sí, he tenido algunos días malos, claro que sí, hasta el día en el que me dije: mira, hay que decirlo públicamente y antes, lo que es hasta más importante, debes salir del armario ante tus amigos y familiares. Y una vez que ellos dejan en claro que todo está bien, tu vida mejora mucho.
Los retos del futuro para una mayor inclusión en el fútbol
ESPN: ¿Cómo mejorarías la igualdad e inclusión dentro del fútbol? ¿Qué retos le depara el futuro a esta lucha?
Hitzlsperger: Bueno. Primero que todo, no lo califico de 'lucha'. No lo quiero llamar 'lucha'. Cómo decir que tenemos claro lo que queremos conseguir y para qué sirve el fútbol. Es un deporte hermoso, pero no nos engañemos.
La gente que dice que el fútbol debe mantenerse alejado de la política no ve la realidad. La política siempre ha estado inmersa en el fútbol. Sólo hay que ver la gran cantidad de políticos que asisten a encuentros de fútbol. Eso, por sí mismo, demuestra lo político que es este deporte. Y no entiendo por qué algunas personas dentro del fútbol lo pueden utilizar como una plataforma para divulgar sus mensajes mientras que a otros no les es permitido.
Y es allí cuando me digo a mí mismo: Muy bien, seguiré haciendo lo que hago. Digo que amo el fútbol, pero también diré que allí está para albergarlos a todos. No debemos excluir a nadie. Y si la gente no lo ve de esa forma, pues tendrán una discusión conmigo. Se trata, más que todo, de volver a mi ser e intentar ser un modelo para seguir, intentando defender la buena causa y seguir haciéndolo.
Si eso no le gusta a la gente, pues no les gusta. Pero no retrocederé para dejar de decir que el fútbol es un deporte para todos y que no debe excluir a nadie.
ESPN: ¿Estás trabajando para crear alguna organización, proyecto, congregar a la gente para atacar estos retos que debemos enfrentar?
Hitzlsperger: Lamentablemente, no lo he hecho aún. Lo he pensado. Antes del Mundial fui a Nepal para ver a los familiares de migrantes obreros y, por supuesto, la gente donó dinero. E intentamos ayudar a la viuda de alguien que falleció y a sus hijos para costear sus matrículas escolares. Eso estuvo bien. Estoy muy contento con ello, pero no lo hago a gran escala porque, a fin de cuentas, como acabas de decir, me mantengo activo dentro del fútbol. Me encanta este deporte. Veo partidos. Quiero formar parte de él. Así que hago ambas cosas. Y, como persona, cuando me haces preguntas, pues las respondo. Pero si no preguntas por ello, me centro en ver un partido de fútbol y hacer lo mejor que puedo para tener éxito en este deporte.
ESPN: Entonces, hablemos de las cosas que podemos cambiar. Hablábamos sobre las cosas por hacer, lo que se debe cambiar en el mundo del fútbol en cuanto a inclusión y diversidad.
Hitzlsperger: Pues bien, empiezo con los clubes y a ese nivel, todos y cada uno de los clubes tienen la responsabilidad de cuidar a la gente que forma parte del club, en la ciudad donde se encuentran. Lo viví mucho en Inglaterra y Alemania, lo que fue fenomenal, porque los clubes entienden que su propósito es congregar a la gente. Y como el futbol profesional es tan grande, hay mucho dinero de por medio.
Los clubes tienen recursos para apoyar a la gente de su zona. Y creo que está muy bien empezar de a poco; por ejemplo, dentro de tu comunidad y ayudar a la gente que forma parte de la oficina, al igual que a quienes juegan en la cancha.
ESPN: Aún falta que una gran celebridad del fútbol, que sigue jugando en activo, decida alzar la voz, bien sea mediante una declaración o saliendo del clóset. Ha pasado en el fútbol femenino. ¿Te imaginas que ocurra en el fútbol femenino?
Hitzlsperger: Pues bien, en este momento creo que es posible, claro que sí. Y he conversado con Jake Daniels. Es un futbolista muy joven que juega en las categorías inferiores en Inglaterra, que ha demostrado que se puede hacer incluso en el inicio de tu carrera. Veo pequeños pasos adelante, pero es irrespetuoso calificarlos de 'paso pequeño' porque su historia es poderosa. Acaba de empezar su carrera y dijo, miren, así soy yo y veremos qué pasa. Eso es lo que considero como mejora. Lo ves en otros deportes, como la NFL. Allí tenemos un ejemplo.
Estamos avanzando, quizás a un ritmo lento, pero estamos avanzando: sólo tenemos que seguir adelante.
ESPN: Hablando de la estructura del fútbol y la industria, ¿cómo cambiarías para mejor?
Hitzlsperger: Pues bien, el cambio sucede constantemente, y no sería tan negativo diciendo que hay mucho por cambiar. Tenemos muchos ejemplos positivos. Cuando salí del clóset hace casi 10 años, hubo una reacción muy positiva. Por eso, mira, hay elementos positivos y no siempre debemos resaltar lo negativo que hay por allí.
La discriminación existe. Pero mejor centrémonos en los aspectos positivos: el aplauso de la afición, de los medios. Y eso es lo que quiero hacer en el futuro. Hablar más sobre los avances positivos y los ejemplos positivos que tenemos dentro del mundo del fútbol, en vez de enfocarnos en lo negativo.