Tigre recibió a Central Córdoba en la séptima fecha del Torneo de la Liga y apenas tardó un minuto en romper el cero: lo hizo de la mano de Galván y tras una asistencia deluxe de rabona de Florián Monzón.
Mientras los espectadores terminaban de acomodarse y ambos equipos iban por el mismo camino, Monzón se inventó una genialidad que dejó a todos sorprendidos.
Tras enganchar de pierna derecha dentro del área de los santiagueños, se acomodó y centró rápidamente con una rabona que fue perfecta, ubicó la cabeza de su compañero y Galván remató en soledad para romper la igualdad en la primera intención de ataque del juego.
En el complemento, el Ferroviario reaccionó y empató con gol de Luis Angulo. El juego finalizó en igualdad y no se sacaron diferencias en Victoria.