Diego Martínez, entrenador de Boca Juniors, analizó el emotivo triunfo por penales ante Talleres, por los octavos de final de la Copa Argentina, y se refirió a su desahogo post definición de 22 penales.
"Me caí porque me mareé. No se me cruzó nada: se me nubló todo. Justamente, se me nubló todo", indicó el DT de Boca en zona mixta.
Y expresó: "Otra final más que juega este grupo. Durante estos nueve meses que estamos juntos, lo único que dije en la charla y antes de los penales es que todas las finales que jugamos este año merecimos ganarlas, y que la única forma que yo sé y que me enseñaron es que las cosas, cuando no salen, hay que seguir intentándolas".
"Más allá de cualquier pavada que se pueda hablar por afuera, yo me guío por el día a día. Y este grupo lo sigue intentando y cada final que juega la juega para ganar y merece ganarla. Hoy la merecimos ganar en los 90', le dije a Pol (Fernández) recién, cuando nos saludamos en el vestuario, que no tendríamos que haber sufrido tanto, quizás por eso las sensaciones que uno sintió después. Más allá de que merecimos ganar en los 90, creo que el fútbol al final, como una vez me dijo Heinze, 'el laburo garpa' y el laburo de estos muchachos garpó. De esta manera sufrida... tendrá que ser así pero el laburo garpó y pasamos a otro fase de una competencia que queremos seguir peleándola y jugándola de manera justa", completó.
Además, Martínez se ilusionó con que el partido de este sábado sea "bisagra": "Es muy importante, ojalá sea bisagra. Ojalá sea la sensación de que tenemos otra final por penales y la logramos pasar. Ojalá que todo esto que sentimos los que somos parte del club pueda ser bisagra. Pero lo que me quedó es que durante 90 minutos hubo un equipo con una propuesta superadora al rival, un gran rival porque quizás minimizamos porque pareciera que era la obligación -y lógicamente- porque representamos a Boca y es nuestra obligación (pasar de ronda) pero enfrente había un gran rival, con grandes futbolistas, con un muy buen entrenador al que le costó mucho neutralizar nuestro juego".
Finalmente, el DT de 45 años se refirió a las dudas en torno a su continuidad: "No consumo pero es lógico, estamos en un club como Boca tengamos la obligación de ganar cada partido. Si no arrancamos bien y no lo damos vuelta, como con San Lorenzo, se pongan en duda que no arrancamos del todo bien. Si jugamos 70 minutos como contra Estudiantes, después de quedar eliminados como quedamos eliminados, es normal, son las reglas del juego".
"Pero puertas adentro y en la semana de trabajo yo me guío por lo que siento por los jugadores es eso: el abrazo, el abrazo con Gary Medel, a quien no le tocó jugar. Después lo demás son reglas de juego, que sabemos que están, pero nuestro termómetro está en el día a día", concluyó.