Por un golazo inolvidable de Ángel Di María, Rosario Central le ganó 1 a 0 a Newell’s el clásico rosarino en el Gigante de Arroyito, por la sexta fecha del Torneo Clausura 2025.
Es imposible analizar este partido, siempre intenso y frenético, que paraliza una ciudad, sin empezar por Ángel Di María, uno de los futbolistas argentinos más importantes de la historia. De regreso en Central, donde todo empezó, Fideo encaró su primer clásico en casi dos décadas.
Pero lo que parecía quedar en algunos destellos, porque su presencia nunca pasa desapercibida, se convirtió en un derbi que el Canalla recordará por todos los tiempos. El reloj marcaba 82 minutos cuando el campeón del mundo se hizo cargo de un tiro libre en posición de gol. Quizás no para la mayoría de los futbolistas, pero sí para Fideo, que a lo largo de su carrera demostró que no hay pared que no se pueda romper. Si se insiste, se puede.
En este caso no fue Nacho Malcorra, otro especialista de la materia, el que pateó. Sí lo hizo en el primer tiempo, generando una atajada de Juan Espínola, quizás con su golazo para ganar otro clásico en la memoria.
Pero no. Este tiro libre tenía que ser de Di María. Ni un segundo dudó Fideo, ex Real Madrid, Manchester United, PSG, Juventus y Benfica. El remate al arco estaba cantado. Lo que él sabía, además, era que de tan lejos la iba a clavar en el ángulo superior izquierdo de Espínola, que con su volada solo lo hizo más épico. Sí, golazo al ángulo, locura en Arroyito y un tanto antológico, para los libros de historia.
Ya había anotado un par de goles, ambos de penal, desde su vuelta, pero ningún gol tan impresionante ni en un partido tan resonante. De hecho, Di María no había ganado ninguno de los dos clásicos que había jugado, aunque hoy día se empezó a hacer costumbre: Central lleva cinco clásicos seguidos ganados y apenas perdió uno de los últimos diez.
El historial también lo favorece al Canalla, con más de 20 partidos de diferencia.
Hoy la historia no había comenzado sencilla para Central: en el primer tiempo tuvo la pelota, pero apenas llegó con el mencionado tiro libre de Malcorra. Newell's se replegó y, sumada a la típica fricción de estos partidos, hubo muy poco fútbol.
De cara al complemento, el equipo de Ariel Holan se adueñó más decididamente del partido y superó al del Ogro Fabbiani, que no le encuentra la vuelta a los clásicos. Alejo Véliz, otro repatriado, jugó un gran segundo tiempo y estuvo cerca de marcar, pero el dominio de Central, tampoco apabullante, no se traducía ni en llegadas claras ni en goles.
Hasta Di María. Fideo, claro, rompió todo con su gol inolvidable. De ahí en más, una expulsión a Luciano Lollo, de la Lepra, por doble amarilla y poco más. La historia ya estaba escrita.
Central, líder de la Tabla Anual con 45 puntos, ahora también es tercero de la Zona B, con 10 unidades, y se mantiene como uno de los invictos del Clausura. En la próxima fecha, la Academia visitará a Sarmiento.
Newell's, por su parte, sigue sin levantar en el Clausura. Suma 6 puntos en igual cantidad de presentaciones y deberá afrontar una semana difícil que culminará con el partido ante Barracas en el Coloso del Parque.