Sao Paulo es el nuevo equipo de James Rodríguez. Gigante del fútbol brasileño con todos los títulos del continente y tres referentes de la gloria: Cafú, Kaká y Raí.
Juega en el Morumbí. Un coliseo de hazañas y victorias en el barrio del mismo nombre. Zona coqueta de la ciudad, que lo identifica como el más burgués del clan paulista. Por eso el clásico de la metrópoli tiene nuevo nombre desde hace 30 años. Lo enfrenta a Corinthians, arraigado en el sentimiento popular.
Sao Paulo es el Tricolor. Tres veces campeón de CONMEBOL Libertadores. Dos de Sudamericana. 18 del Brasileirao. Dueño de América con ese equipo de autor del técnico Telé Santana en 1992 y 1993. Exquisito, disciplinado y letal intimidó sucesivamente al Barcelona dirigido por Johan Cruyff y al Milan de Fabio Capello en la Intercontinental de Japón. ¡Imbatible!
Su grandeza se mide con esos títulos. También con los cracks que fabricó. La lista es larga. Tres campeones recientes del Mundial lideran ese top: el lateral Cafú, inventor del puesto; en 1994 y 2002. El mediocampista Raí, cultor de la camiseta 10 del club, en 1994. Y Kaká, (también 2002) Balón de Oro 2007, previo a la hegemonía de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.
El portero Rogerio Ceni es otro de sus patrimonios. Jugó 22 años y marcó 132 goles con su único equipo. Un récord histórico que se antoja eterno.
La técnica de James encaja en la tradición de Sao Paulo. Juego alegre, vistoso que deberá combinar con sacrificio pues el presente es opaco. Está sexto en la liga local, abajo en la semifinales ante Corinthians y a punto de disputar los octavos de final de Conmebol Sudamericana ante San Lorenzo.
El campeonato local es esquivo desde 2008. El último festejo continental lo ganó en 2012. Refrendar sus coronas acelera las urgencias. Los hinchas están motivados. El proyecto del nuevo 10, luce bien.