SANTIAGO -- El delantero nacional Humberto Suazo demandó a a Blanco & Negro por despido injustificado y acoso laboral, a dos meses de su polémica salida de Colo Colo tras un conflicto con el cuerpo técnico encabezado por José Luis Sierra.
Chupete exige un pago de indemnización de 815 millones de pesos por el sueldo hasta diciembre de 2016, periodo en que expiraba su contrato, además de los premios por su participación en la obtención del Torneo de Apertura.
En la demanda, que se puede apreciar en el sitio web del poder judicial, el atacante explica: "fui sustituido (contra San Marcos) en el minuto 64 por el jugador Juan Delgado, extremo izquierdo, posición y función muy distinta a la que yo realizo durante el juego. Este hecho se había repetido en varias ocasiones. Contra Universidad Católica, luego de un acto de indisciplina de Esteban Pavez, se me sustituye de manera temprana, sin ninguna explicación. Con Arica se me sustituye en mi mejor momento dentro de la cancha, coartando nuevamente mis posibilidades de triunfar en el fútbol nacional".
Sobre su discusión con el Coto, señala: "sentí en ese minuto un hostigamiento y presión irresistible por parte del equipo técnico, como así también de los miembros de la directiva de la demanda, que han denostado mi nombre públicamente en todos los medios de comunicación, generando una verdadera vulneración a mi honra. Esta actividad suscita pasiones y sentimientos en los jugadores. Al momento de la sustitución procedí a sentarme en el banco de mi ex equipo, momento en el cual el señor Pedro Reyes me miraba fijamente, desafiándome a que le diga algo o que reaccione".
"Mi reacción fue preguntarle qué miraba, lo que generó ridículamente mi desvinculación a los pocos días después, dejándome sin fuente laboral. Rechazo lo indicado en la carta de despido, ya que además de lo ya señalado, jamás crucé palabra con el entrenador de mi ex club, en el partido o en algún momento posterior. Al llegar a camarines me encuentro con el representante legal de la demandada, el Señor Aníbal Mosa, quien me felicitó y habló conmigo con total normalidad, demostrando que mi despido es una acción desesperada por no pagar lo que en derecho me corresponde", agregó.
Además, Suazo aclaró que el DT nunca se acercó a conversar con él. "El 20 de octubre, se me acerca el preparador físico Marcelo Canessa, quien me informa que el director técnico José Luis Sierra no me quiere en la cancha ya que se había decidido sancionarme y había sido separado del plantel. Ante mi asombro me fui al gimnasio. En este punto debo ser muy claro en el sentido de que en ningún momento el técnico José Luis Sierra se acercó a conversar conmigo", afirmó.
Finalmente, ejemplificó su caso con el de Jason Silva, quien pisó un lienzo de Universidad de Chile tras un superclásico, el escupo de Esteban Pavez a un jugador de Católica y los televisores de Esteban Paredes, alegando que estos futbolistas no fueron sancionados.