La historia fue escrita. Millonarios y Atlético Nacional disputaron una final a la altura de lo que significan ambas instituciones y brindaron un espectáculo de alta tensión hasta el final. El camino hacia el título fue sinuoso y lejos estuvo de ser un recorrido sencillo. A lo largo del semestre, el Embajador atravesó momentos que marcaron la campaña y que fueron vitales para mantener la ilusión de la estrella 16.
La temprana clasificación a cuadrangulares
Millonarios realizó una gran campaña en el primer semestre. Cosechó 38 puntos en 20 partidos con diez victorias, ocho victorias y dos derrotas. Logró clasificar a falta de tres fechas para el cierre del campeonato gracias a una victoria por 1-0 ante Santa Fe, su clásico, con gol de penal de Leo Castro. Esto le permitió al Embajador poder rotar un poco la plantilla y hacer descansar a sus principales figuras, que también tuvieron que lidiar con la CONMEBOL Sudamericana.
El buen desempeño de Millonarios también se sostuvo en su rendimiento en El Campín, que se convirtió en un fuerte para los de Gamero en todo el semestre. No perdió en todo el 2023 y arrastra un invicto de 23 partidos desde octubre del año pasado, cuando le tocó perder ante DIM en torneo local. Solamente Águilas logró más puntos en casa en el 'todos contra todos' con 26. Millos acumuló 24 con siete victorias y tres empates.
Lesiones, ausencias y reemplazos a la altura
Alberto Gamero tuvo que manejar varias bajas por lesión y convocatorias en el tramo final y durante la temporada. El samario encontró buenas respuestas en su plantel aunque no hayan ocupado sus posiciones tradicionales. Jorge Arias fue lateral izquierdo en varios partidos. El futbolista, que se desempeña como central, estuvo en la banda izquierda ante la necesidad del entrenador y lo hizo con grandes rendimientos. También se vio con la responsabilidad de ser quien suplante a Juan Pablo Vargas en las dos finales puesto que el nacido en Costa Rica se encuentra con su Selección.
Juanito Moreno fue otro quien tuvo que saltar al campo de juego cuando Álvaro Montero se marchó con Colombia. El portero se mantuvo invicto en la campaña: atajó en ocho encuentros, ganó seis y empató dos. Fue figura ante Independiente Medellín en el cierre del cuadrangular. Tuvo tres tapadas que mantuvieron a su equipo a flote. Finalmente el Embajador ganó 2-1 aquel encuentro.
La cantera, al rescate: Beckham Castro y una irrupción clave para reemplazar a Óscar Cortés
Las divisiones menores del Embajador han sido fuente de grandes jugadores en la última época. Uno de ellos, Óscar Cortés, se vio comprometido con juegos de Selección al inicio del cuadrangular. Estuvo con la Selección Sub 20 y luego fue llamado por Néstor Lorenzo para la gira internacional. Esta baja sensible, de un futbolista desequilibrante en ataque, fue bien suplida por otro joven de la casa: Beckham Castro. El futbolista de 19 años se ganó la confianza de Gamero con buenas actuaciones. Jugó en todos los partidos del cuadrangular, anotó dos goles y repartió dos asistencias. Ya en la final, el samario optó por Jader Valencia e incluyó a Óscar Cortés en la final de vuelta para definir en Bogotá.
La doble fecha ante América para allanar el camino
Uno de los momentos determinantes en este cuadrangular para Millonarios fue la doble fecha que tuvo que enfrentar ante América de Cali, otro de los favoritos. Primero le tocó visitar a la Mechita y se quedó con el triunfo por 1-0 en un partido peleado. El local pudo haber empatado el partido con un penal pero Facundo Suárez envió su remate directamente afuera.
En el segundo juego, en Bogotá, Millos se hizo fuerte y tuvo que revertir el marcador. América comenzó ganando con gol de Adrián Ramos. Los de Gamero reaccionaron rápido y empataron el compromiso con tanto de Fernando Uribe antes de que terminaran los primeros 45 minutos. Sobre el final, Daniel Cataño marcó para el 2-1 definitivo que dejó bien parado al Azul a falta de dos fechas.
Montero, el especialista en penales que fue fundamental para la 16
El sorteo del Grupo B no fue positivo para Millonarios. Le tocó compartir con Medellín, América y Boyacá Chicó. Inició el grupo ante el Poderoso e igualó 2-2. En la segunda fecha, fue local del Ajedrezado y ganó por la mínima con tanto del ex-Pereira Castro. En ese cotejo, Álvaro Montero demostró su capacidad para tapar penales, que también daría frutos en al gran final. Contuvo el disparo de Geimar Balanta en la primera etapa y sostuvo al equipo. Esos tres puntos fueron fundamentales en la carrera final del equipo para meterse en la final.
Montero se vistió de héroe en la final. Como ocurrió con Tolima en 2018, atajó dos penales en la tanda final, amargó a Nacional e inclinó la balanza a favor del Embajador. Fue una de las figuras de la final y obtuvo su segundo título de Liga.