Junior está de celebración luego que consiguiera su décima estrella en la historia. Se impuso al Deportivo Independiente Medellín en la final y lo hizo nuevamente en una definición por penales (5-3) en la que Léider Berrío fue protagonista.
Berrío volvió a amargarle la navidad a los hinchas del Medellín. El Poderoso iba ganando la serie en el global hasta el minuto 90, cuando Vladimir descontó para el Tiburón y obligó ir a los penales. Santiago Mele hizo lo suyo deteniendo el disparo de Daniel Torres y luego vino el momento en que Léider tenía que patear para acabar con las posibilidades del DIM y así gritar campeón con Junior.
En el arco norte del Atanasio Girardot, al frente de la pelota se paró Berrío, con el numero ‘7’ en su espalda tomó distancia con ocho pasos hacia atrás, se fue luego perfilando para rematar de derecha y sacó un disparo con calidad que engañó a Mosquera Marmolejo y que puso a celebrar a toda Barranquilla, mientras el máximo escenario de los antioqueños se quedaba en silencio.
El título se le escapó al Deportivo Independiente Medellín y nuevamente el verdugo del Poderoso fue Léider Berrío. El mediocampista de 25 años también había sido el encargado de ponerle fin a la tanda de penales en la que finalmente celebró el Deportivo Pereira en diciembre de 2022.
En aquella oportunidad también estuvo bajo los tres palos del DIM el portero Mosquera Marmolejo. La Gran Final se disputó en el Hernán Ramírez Villegas y de nuevo el cobro definitivo estuvo en los pies de Léider Berrío. Aquella noche, en pleno ‘día de las velitas’, el volante sacó un potente remate arriba, imposible para el guardameta del rojo paisa, que voló hacia su izquierda. Un disparo que le dio el primer título en la historia a los Matecañas.
Con el penal que le dio la gloria a Junior en el Atanasio, Berrío dejó atrás una irregular campaña en lo personal durante este semestre, el mediocampista apenas disputó 14 partidos de Liga con el club y en casi todos lo hizo ingresando desde el banquillo de suplentes.