Los malos resultados sacaron al técnico Arturo Reyes de Junior. Deja al equipo sexto y con poco fútbol en la liga colombiana.
La eliminación en octavos de Conmebol Libertadores ante Colo Colo en Barranquilla fue el primero de los golpes que aceleró la crisis. Aunque ganó a Tolima en Ibagué, la derrota en Pasto y el empate frente a Santa Fe determinaron la salida del entrenador samario.
Además de los resultados, fue cuestionado por el nivel de juego considerando la calidad del plantel. Pudo ofrecer más en Chile y el fin de semana anterior, pasó trabajos para igualar contra los cardenales, en inferioridad numérica desde el minuto 55.
Reyes se sentía con fuerzas para seguir. "Cuerpo técnico y jugadores estamos unidos" y "Junior va a pelear el título", fueron las frases con las que intentó tranquilizar el malestar de los hinchas. Sin embargo, su ciclo estaba agotado.
El diario El Heraldo de Barranquilla confirmó la noticia antes del medio día.
"Fuad Char confirma la salida de Arturo Reyes y la llegada de César Farías", publicó.
Se fue nueve meses después de ganar el título del fútbol colombiano. Disputó los cuadrangulares anteriores, y clasificó invicto a los octavos de la Copa. Le faltó más consistencia en el juego, cuestionado por la afición.
Ganar la décima estrella nunca lo blindó entre la gente. Fue mirado de reojo y su segunda etapa finalizó con fuertes reclamos. Dejó al equipo sexto en la tabla con 12 puntos, cuatro menos que el líder Nacional.