Jonatan Álvez destacó este jueves el buen momento colectivo e individual que disfruta en Atlético Nacional, que esta semana se clasificó al Grupo F de la Copa CONMEBOL Libertadores, donde coincidirá con Nacional, Argentinos Juniors y Universidad Católica. En declaraciones a Radio Sport, el delantero uruguayo también habló sobre el interés que existió por parte de Peñarol por contratarlo, y valoró el profesionalismo y carácter de Andrés D’Alessandro, con quien coincidió en Inter.
Tras haber perdido en la ida por 1-0, el equipo colombiano de Medellín goleó 4-1 este miércoles a Libertad y pudo avanzar a la fase de grupos de la Libertadores. Álvez comentó: “Ellos eran un rival muy duro, tuvimos una distracción y convirtieron. Pudimos irnos al entretiempo empatados para calmarnos un poco y teníamos la conciencia tranquila de que podíamos dar vuelta la serie”.
“En el entretiempo el técnico Alexandre Guimarães nos pidió que tuviéramos el balón y con el correr de los minutos nos impusimos, con el 2 a 1 sabíamos que estábamos cerca, yo pude marcar el 3 a 1 y luego mi compañero Jefferson Duque cerró la serie anotando el cuarto gol del equipo”, acotó el uruguayo.
El futbolista que en Uruguay jugó en Boston River, Coraceros, Platense, Torque y Danubio, comentó que la idea del entrenador es tener la pelota sin apurarse para así generar el espacio y luego culminar las jugadas de la mejor manera posible.
Sobre las individualidades de Atlético Nacional, Álvez destacó particularmente a dos de sus compañeros: Jarlan Barrera y el Rifle Andrés Andrade: “Son jugadores de mucha calidad; si ellos están enchufados, son el motor del equipo para lograr cosas. Son piezas fundamentales, nuestro juego pasa por ellos”.
El uruguayo se refirió al grupo F de la Copa, donde también estarán Nacional de Uruguay, Argentinos Juniors y Universidad Católica de Chile: “Si estamos enchufados, nosotros tenemos un equipo fuerte para poder pasar. Esto recién empieza y hay que jugar, en el correr de los partidos se va viendo quién es quién. No hay que subestimar a nadie, yo confío en que podamos ganar los tres partidos de local y trataremos de rescatar algún punto afuera para poder clasificar tranquilos”.
Sobre el conjunto uruguayo, el delantero indicó que vio las finales que el Bolso ganó ante Rentistas y destacó la presencia del goleador Gonzalo Bergessio: “Él tiene una trayectoria importante y también están los pibes del medio que juegan muy bien. Y como todo club uruguayo es un equipo aguerrido, hay que tratar de bloquear a sus mejores jugadores y nosotros trataremos de hacer nuestro juego”.
Álvez tuvo su primera salida al exterior a mediados del 2014: el delantero se sumó a Vitória Guimaraes de Portugal luego de consagrarse campeón con Danubio (no pudo jugar las finales ante Wanderers al estar lesionado). Tras una temporada en Europa regresó al fútbol sudamericano para jugar en Liga de Quito y Barcelona de Guayaquil; en el 2018 pasó a Junior de Barranquilla, y algunos meses después se incorporó a Inter de Porto Alegre.
El futbolista recordó su etapa en el equipo brasileño: “Yo jugué en todos los equipos de mi carrera salvo en Junior y en Inter, donde no jugué casi nada. A Inter había ido para poder jugar y demostrar pero jugué poco y nada por cosas de dirigentes que ahora no vienen al caso”.
“En Inter estuve con Andrés D’Alessandro, un grande para el club y que ha ganado títulos increíbles”, subrayó el uruguayo sobre el volante argentino que en esta temporada 2021 jugará en Nacional.
Y el delantero agregó: “D’Alessandro es un ejemplo a seguir como profesional, y como persona tuve el gusto de conocerlo también y es un tipo con carácter muy fuerte, no le gusta perder, quiere ganar todas”.
En el 2019, el uruguayo volvió a Barcelona para recuperar su nivel y en enero del 2021 fue oficializado como nuevo jugador de Atlético Nacional. Álvez comentó que al principio le costó tener que adaptarse nuevamente a la altura (pasó de jugar a 40 grados en Guayaquil a jugar en Medellín) y al estilo de juego del equipo y sus compañeros: “Pero ahora ya estoy agarrando el estilo y ritmo del equipo, demostrando que queremos ganar todos los partidos”, afirmó.
El delantero de 32 años reconoció que en el segundo semestre del 2020 el entrenador Mario Saralegui lo llamó para incorporarlo a Peñarol: “Tuve un diálogo con el profe Saralegui, le agradecí en su momento por haberse molestado en llamarme pero yo estaba enfocado en Barcelona”.
“Yo todavía no quería volver para Uruguay, la diferencia económica era importante, hablé con Saralegui sí, pero conversé con mi familia y no era el momento de regresar. Por suerte pude lograr el campeonato con Barcelona y eso me dio la posibilidad de llegar a Atlético Nacional, un club espectacular; estoy muy contento en Colombia, la gente es muy amable conmigo y trato de brindar lo mejor de mí”, afirmó Álvez.
El futbolista dijo que sólo ha recibido el interés de Peñarol y que por ejemplo ‘de Nacional nunca hubo una llamada’. Sobre su futuro aseguró: “Esperaré, y trataré de dar lo mejor acá en Colombia y capaz que en un futuro no lejano regresaré a mi país al club que me quiera contratar, analizando con mi familia como siempre lo mejor para mi futuro”.
El delantero contó que la diferencia económica sigue siendo muy importante entre el fútbol uruguayo y el de otros países sudamericanos: “Yo trato de que mi familia esté bien. No es que gano millones pero tengo a mi familia contenta y pudiendo hacer mi casita. Hoy pienso en jugar y en conseguir cosas importantes, gano bien pero trato de hacer mi trabajo de la mejor manera; el dinero es un plus para seguir creciendo pero lo importante es demostrar a la institución que uno quiere ganar cosas importantes y quedar en la historia del club”.
En el final de la nota, el uruguayo comentó cómo se vive la pandemia del coronavirus en Colombia: “La situación está complicada, yo no salgo para nada de mi casa. Mi rutina es: casa, entrenar, entrenar, jugar. Estamos jugando muy seguido porque tenemos que terminar el torneo antes de la Copa América, haciéndonos hisopados todo el tiempo para estar tranquilos. Acá hay cuarentena y a las cinco de la tarde todo el mundo en su casa”.