Un golpe bajísimo para La Roja en Copa América fue esta derrota categórica ante Paraguay por 2-0. Preocupa cómo la ausencia de Erick Pulgar hizo ver al medio terreno un sector despoblado y con poca acción para generar ocasiones de peligro. No hubo mucho para destacar, salvo la entrega y garra de algunos pocos. Mucho que trabajar en el aspecto mental para los cuartos de final, instancia que podría hacernos ver las caras con Brasil.
Claudio Bravo: No tuvo mucho que hacer en el gol, pero sí tuvo una peligrosa salida en falso en un cabezazo que, afortunadamente para los chilenos, González se perdió solo en el segundo palo. Fue engañado por Almirón en el penal que el paraguayo pateó
Mauricio Isla: Muy marcado por los paraguayos. La ofensiva rival lo mantuvo en su zona con pocas posibilidades de subir y convertirse en un agente ofensivo peligroso, siendo esta una de las buenas cualidades del “Huaso”.
Gary Medel: En un contraataque comandado por Carlos González estuvo muy bien posicionado impidiendo el avance del atacante para que se fuera solo con el arco en la mira. Lamentablemente cometió el penal que significó el 2-0 de Paraguay. Salió lesionado, esperemos que no sea nada.
Francisco Sierralta: Pese a unos correctos primeros minutos, se da la sensación que con su condición de zaguero espigado pudo haber hecho algo más en la apertura de la cuenta de Paraguay. Intentó muchas veces salir jugando en medio terreno, pero perdía pelotas que pudieron costar caro. En el segundo tiempo, pudo sacar pelotas claves desde el fondo y se convirtió en el más regular.
Eugenio Mena: Las jugadas ofensivas guaraníes se dieron por su lado durante los primeros 15 minutos de encuentro. Las asociaciones fluían por ahí y daba la sensación de que dejaba mucho espacio. Le correspondía marcar a Samudio cuando éste cabeceó para marcar el 1-0, pero lo hizo de manera floja.
Arturo Vidal: Aún no ha podido recuperar el nivel de antes, pese a su esfuerzo físico por cubrir los espacios de la zona media de la cancha hasta el último segundo de partido. Si en partidos menos intensos se vio desaparecido, ahora con más presión al medio iba a dudar con el marcaje paraguayo. Sigue perdiendo balones fáciles.
Tomás Alarcón: No tuvo miedo para ir al piso y recuperar balones peligrosos, pero la ausencia de Erick Pulgar pareció ser un fantasma en el medio que el criado en O’Higgins no fue capaz de ahuyentar por completo. No por nada Chile fue incapaz de generar juego desde el medio terreno.
Charles Aránguiz: Extraño partido del “Príncipe”, pero no solamente de él, sino que de toda la zona media. Salvo algunos chispazos dignos de su calidad, no lograron establecer una conexión prometedora con sus compañeros en ofensiva: Brereton, Vargas y Pinares. Dentro de todo, se le agradece su buen juego y entrega, pues logró mover algo al equipo incluso en este partido.
César Pinares: Si bien quiso mostrarse activo por su sector, no logró mostrarse como el distinto del equipo. El hecho de ser un zurdo jugando como extremo derecho implicaba acomodarse para mandar un centro o un pase con su pierna hábil. No marcó diferencias y eso era lo que este duelo exigía.
Ben Brereton: La dura marca de los guaraníes no le permitió exhibirse con libertad como otros partidos. Apenas recibía la pelota, tenía a un rival encima barriéndose para recuperar la posesión. Cuando bajaba a intentar recibir el balón, se mostraba dubitativo y terminaba perdiéndolo.
Eduardo Vargas: Poco fino en la salida, parecía desconectado y no pudo ponerse el overol para hacer circular la pelotita como en los partidos anteriores, debido a la ahogante presión del rival. Para ser justos con “Turboman”, tampoco recibió ninguna pelota con ventaja.
Jean Meneses: Apenas entró en el segundo tiempo se le notó con ganas de marcar diferencias en ofensiva. Sin embargo, el equipo andaba tan bajo en ese aspecto, que las ganas no bastaron para poder intentar siquiera descontar.
Pablo Galdames: El forado existente en el medio campo tampoco pudo ser revertido con su ingreso. No logró marcar diferencias y entregó pelotas erráticas en ataque.
Enzo Roco: Entró a reemplazar a un lesionado Gary Medel, y no tuvo mucha incidencia pues Sierralta asumió el liderazgo en la retaguardia. Temimos lo peor cuando un paraguayo se fue en carrera en solitario al arco de Bravo, y Roco decidió derribarlo. Por suerte el guaraní estaba en fuera de juego.