Junior será el único representante del fútbol colombiano en los octavos de Conmebol Libertadores. Clasificó líder del Grupo D, mientras que Millonarios cerró último y sin victorias.
La Copa fue de extremos para los nuestros. Muy marcados. Los dos últimos campeones del FPC afrontaron el torneo continental con distintas ambiciones. El tiburón sigue adelante. El azul lamenta su segunda peor campaña.
Junior mostró autoridad
Mantuvo el primer puesto de su zona en las seis fechas de los grupos. Culminó invicto con victorias en Brasil y la altura de Quito. Le faltó ganar en Barranquilla. Jugó con criterio en las semanas de doble calendario y aún tiene posibilidad de otra final local.
“Hemos estado jugando cada tercer día, a veces cada cuarto día y el grupo ha respondido de buena forma. Han jugado casi 32 partidos en casi cuatro meses. Esto se debe al trabajo de los jugadores, que han entendido lo que se necesita para poder competir internacionalmente", explicó el técnico Arturo Reyes.
La defensa impulsó la clasificación. Recibió cuatro goles por la solidez del portero Santiago Mele y la consolidación de los centrales Emanuel Olivera y Jermanin Peña. En ataque, la jerarquía de su capitán Carlos Bacca fue definitiva. Hizo tres tantos.
"Junior tiene un gran grupo de futbolistas, todos capacitados. Tuvimos 23 jugadores concentrados y se nos quedaron afuera algunos que nos pudieron dar la mano", añadió.
Aguarda por el sorteo del 3 de junio para conocer su próximo rival.
Millonarios defraudó una vez más
Solo Caracas y Deportivo Táchira evitaron que terminara como el peor de Libertadores. Los venezolanos se despidieron con un punto. El equipo bogotano sumó tres y empezó a hacer cuentas desde temprano. Consiguió un empate en la primera rueda y en El Campín sentenció su eliminación con otras dos igualdades.
Siestas en defensa, bajos niveles individuales, definición imprecisa y nómina corta para las dos competencias explican su último lugar en el Grupo E.
"Nos fue muy mal en esta Copa y debemos replantear para la próxima”, reconoció el técnico Alberto Gamero.
Millonarios tampoco ganó partidos. Anotó seis goles, permitió 12. Le faltó carácter en La Paz, en Coquimbo y Río de Janeiro. Indefendible por lo que representa en el país.
“Debemos mejorar muchas cosas, el mayor error que cometimos fue hacernos dos goles nosotros. Fueron errores nuestros que Flamengo los aprovechó, eso nos llevó a tener un poco más de inseguridad y ellos de tranquilidad. Somos conscientes que hay muchas cosas por mejorar, teníamos una ilusión grande en esta Copa Libertadores y hoy termina", concluyó su entrenador.