BUENOS AIRES - El partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores del 2018 entre River Plate y Boca Juniors se jugará en una plaza neutral, el 8 o 9 de diciembre próximo, según decidió este martes la Conmebol.
Nota entregada por el Presidente de la CONMEBOL a los presidentes de los clubes River Plate y Boca Juniors en la reunión del martes 27 en la sede la de CONMEBOL, en Paraguay. pic.twitter.com/qNBYTRZXx6
— CONMEBOL.com (@CONMEBOL) 27 de noviembre de 2018
La entidad tomó esta determinación en una reunión sostenida con dirigentes de ambos clubes argentinos esta mañana, tras la postergación del encuentro de vuelta que inicialmente se debía jugar el sábado pasado en el Monumental de Buenos Aires, pero que fue suspendido por ataques violentos de hinchas al autobús que llevaba a los jugadores de Boca al estadio.
En un comunicado emitido hace minutos en su sede de Asunción, la entidad rectora del fútbol sudamericano advierte que "resulta prudente que el partido final no se juegue en dicho país" (Argentina) a consecuencia de los incidentes violentos en que resultaron heridos varios futbolistas del Boca Juniors.
La Conmebol tomó la decisión basada en el artículo 4 del Reglamento de Competición de la Copa Libertadores en donde indica que se debe "garantizar los principios de integridad, continuidad y estabilidad de las competiciones, del fair play (juego limpio), deportivo y financiero", según reza en uno de sus apartados.
Aunque en el comunicado se indica que la fecha establecida para jugar el partido de vuelta es el 8 o 9 de diciembre, en una plaza neutral diferente a Argentina y en horario y sede a definirse, este ítem queda en suspenso porque está sujeto al fallo del Tribunal Disciplinario de la Conmebol.
Dicho tribunal estudia la solicitud de Boca Juniors de que el partido no se juegue, que River Plate sea castigado y por ende se le dé el título de la Copa Libertadores a la institución Xeneize.
River Plate pidió, al contrario, que el encuentro se disputara en el Monumental y con público.
"Decidimos que el partido, en caso de que así se defina, se juegue fuera del territorio argentino", dijo Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, a la salida de la reunión.
Sus homólogos de River Plate y Boca Juniors aún no han hecho declaraciones.
El partido de ida de la final de la Libertadores culminó empatado 2-2 en la Bombonera el domingo 11 de noviembre.
Hasta el momento, la ciudad italiana de Génova ya se ofreció oficialmente para albergar el partido de vuelta y se especula con que Abu Dhabi, en Emiratos Árabes, sede del próximo Mundial de Clubes, es otra alternativa como sede.