San Lorenzo no se sacó diferencias con Palestino en el Nuevo Gasómetro por la quinta jornada del Grupo H y comprometió sus posibilidades de avanzar a la siguiente fase de la CONMEBOL Sudamericana.
El Ciclón, que entre todas las competencias encadenó su cuarto partido sin conocer la victoria (y su tercero sin convertir), buscó por todos lados el gol que lo hiciera depender de sí mismo en el certamen continental, pero chocó con la resistencia árabe y quedó muy complicado: debe vencer a Estudiantes de Mérida en casa y esperar un triunfo de Fortaleza frente a Palestino en Chile.
Desde el primer minuto, el equipo de Rubén Darío Insúa buscó el arco contrario, algo que quedó en evidencia con el tempranero cabezazo de Nicolás Blandi, que encontró bien parado a César Rigamonti.
No obstante, el empuje de los azulgranas chocó con su propia falta de claridad: dominó la pelota y cargó contra un Palestino que, muy ordenado en defensa, se plantó e incluso intimidó a Augusto Batalla, que en más de una ocasión se vistió de héroe, salvando el resultado para el conjunto local, pero en ningún momento pudo elaborar jugadas de gol.
En el complemento, el Ciclón, tan aguerrido y voluntarioso como impreciso, se descuidó en el fondo con tal de buscar un gol. Y en ese contexto, los chilenos tuvieron la posibilidad de liquidar el encuentro -y consumar su clasificación-, pero fallaron en la definición, como los azulgranas, que intentaron por medio de Andrés Vombergar, Nahuel Barrios y Malcom Braida, entre otros, pero siempre en vano.
San Lorenzo dominó la posesión y buscó obstinadamente el gol, pero falló en la definición y, para colmo, se quedó con uno menos a cinco minutos del final, cuando el árbitro peruano Diego Haro, quien amonestó a nueve jugadores, sancionó penal de Ezequiel Cerutti, aunque el VAR le advirtió que la falta del extremo había sido fuera del área, por lo que rectificó, cobró tiro libre y le mostró la tarjeta roja al Pocho.
Con este resultado ante un rival directo, San Lorenzo se quedó en la tercera posición, merced a 5 puntos (-2 de diferencia), por encima de Estudiantes de Mérida (3, 10) y por debajo de Fortaleza (12, +11), ya clasificado, y Palestino (8, +1).
De esta manera, el único escenario que clasificará al conjunto de Boedo es un triunfo propio frente a los venezolanos en casa y un éxito de los brasileños en Chile, estudiando en el mano a mano con Palestino la diferencia de gol.