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Martínez, entre la alegría de una meta cumplida y un cambio especial en pleno partido

Festejó Boca Juniors en La Bombonera, por la goleada 4-0 sobre Nacional Potosí, pero igual quedó segundo en el grupo D de la CONMEBOL Sudamericana, ya que Fortaleza también ganó y terminó en el primer lugar. Por eso, el Xeneize dirigido por Diego Martínez espera para conocer nuevo rival, para un cruce directo de mata-mata para poder avanzar más en la Copa, frente a un tercero de la Libertadores.

Era un encuentro clave para el Xeneize y así lo jugó. Se llevó por delante a Nacional Potosí, donde se lo vio a Leandro Paredes, actualmente en Roma, en plena hinchada de Boca, a días de sumarse al seleccionado argentino con vistas a la Copa América. Pero aquel empate sobre la hora que padeció hace dos semanas en casa, frente a Fortaleza, lo pagó muy caro. Ahora esperará para conocer a su siguiente adversario para el mes de julio.

En conferencia de prensa, tras la victoria de Boca, Martínez fue claro: "Hicimos el trabajo que debíamos hacer, y hasta merecimos algún gol más. Cumplimos el objetivo de pasar en la Sudamericana, no el que queríamos de ganar el grupo, pero estamos contentos porque pasamos de fase y ahora esperamos rival para el duelo directo que tendremos".

Y volvió al partido de la Sudamericana ante el conjunto boliviano. "Hoy decidimos poner a Zenón como siempre, pero decidieron ellos en el campo cambiar y vimos que daba resultado tirado sobre la derecha. Fue decisión de él y de Medina, que me lo dijo. Ellos son inteligentes y son los que deciden. Nosotros, como cuerpo técnico, aceptamos porque en la cancha son los jugadores los que saben cómo se sienten más a gusto. Creemos que es bueno darles algunas libertadores para decidieran lo mejor para el equipo y así fue", explicó.

"Sentía que podíamos lograr el objetivo de quedar primeros, pensando que Trinidense le podía sacar algún punto a Fortaleza, ya que esperaba también que se pudiera ganar por goleada. Parecía complejo, pero tenía muy buenas expectativas en este grupo y eso me ilusionaba, pero se dio una cosa y la otra no", agregó el entrenador ante los medios.

"Tácticamente, Pol es muy inteligente. Está jugando un poco más retrasado, pensando en cómo salir, ayuda a liberar a los laterales. Está jugando muy bien, es como un entrenador adentro de la cancha. Creo que cuando el volante central funciona bien en un equipo beneficia mucho al trabajo colectivo".

En tanto, Marcelo Saracchi vivió una noche especial, por haber metido su primer gol en Boca. "Él quiere jugar siempre, te la hace difícil, quiere jugar. No está en un grande como Boca porque sí, quiere rendir y mostrarse y eso es muy bueno", comentó Martínez.

A su lado, el propio Saracchi comentó: "Estoy contento con mi desempeño y el del equipo. Se lesionó Lucas (Blondel), después Luis (Advíncula) y no dudé en decirle que sí a Diego cuando me consultó para ser lateral por la derecha. Estoy para sumar y ayudar al equipo; me tocó y lo pude hacer bien, pero estoy más feliz con el equipo. Hacer un gol en este club fue increíble. Me emociona también que los muchachos se alegraron por mí, eso es muy lindo para mí".