La previa de la revancha entre Independiente del Valle y Once Caldas se vivió con euforia por parte del local. Mientras que el cuadro ecuatoriano asumió con tranquilidad esos momentos, centrados en el objetivo, que al final cumplieron y avanzaron a la semifinal de la CONMEBOL Sudamericana.
En imágenes que se vieron en redes sociales, la plantilla del cuadro colombiano llegó al estadio Palogrande, en medio de la algarabía de sus aficionados. En medio de ese clima, varios jugadores de Once Caldas, comandados por Dayron Moreno, se subieron encima del bus y comenzaron a cantar al ritmo de la hinchada.
Así entraron al escenario, que estuvo lleno para un partido definitivo. En la ida, el Blanco Blanco jugó un partido inteligente y aprovechó la superioridad númerica, tras la expulsión de Mateo Carabajal en el primer tiempo. Así se llevó la ventaja por 2-0, por lo que el ambiente triunfalista para la vuelta se sentía entre jugadores y afición.
Sin embargo, el partido tomó otro rumbo. Independiente apareció en toda su dimensión, en el que puede ser el mejor partido en el ciclo de Javier Rabanal, que con su propuesta superó ampliamente a Once Caldas.
El doblete de Michael Hoyos impulsó al equipo, que incluso estuvo cerca del tercero para liquidar la serie antes de los penales.
“Creo que ellos se sentían ganadores, estaban pensando en una clasificación; seguro tenían preparada una fiesta por clasificar a semifinal. Es un club al que respetamos y apreciamos mucho, porque hay una muy buena relación. Han tenido que esperar muchos años para vivir una instancia así y tal vez les pasó factura”, dijo Andrés Larriva, gerente comercial de Independiente, tras el partido.
En ese contexto, ya con la clasificación asegurada, Independiente si festejó. También se difundieron imágenes de esa celebración en el camerino y con un recado al rival: los jugadores imitaron el baile de Moreno, con el que festeja sus goles.