El lateral derecho pensó que iba a cumplir todos sus sueños cuando tuvo una oferta para jugar en Noruega, pero se topó una realidad totalmente distinta a la que le prometieron
Muchos piensan que la vida de un futbolista se arregla cuando este se convierte en jugador de un equipo grande o cuando dan el salto a jugar a un club en el extranjero y hay muchos casos en los que esto es correcto, pero también muchos otros en los que no sucede.
Heiner Mora, defensa costarricense de 37 años es un ejemplo de que salir al fútbol internacional no le arregla económicamente el futuro a alguien. Corría el año 2012 cuando el entonces jugador del Saprissa tuvo una oferta del Honefoss de Noruega, club al que partió con muchas expectativas y con muchos sueños por alcanzar.
Sin embargo, al llegar allá se llevó la sorpresa de que las condiciones que el representante le ofreció, muchas no eran como se las habian comentado estando en Costa Rica y que el camino por triunfar iba a ser mucho más duro de lo que había pensado.
“Muchas veces hay que tener mucho cuidado con los representantes que habian antes, gracias a Dios ya en eso hay más apoyo de la ASOJUPRO, antes llegaba un representante y te decía que tenía un contacto y cuando llegabas allá veías la otra cara de la moneda. Yo me fui como si fuera Cristiano Ronaldo o Messi con condiciones de todo y ya llegando allá me empecé a dar cuenta de que la persona que me llevó me estaba mintiendo”, explicó.
Pese a que mucho de lo prometido no se estaba cumpliendo, Heiner Mora decidió firmar contrato pues tenía muchas ilusiones por jugar en el extranjero, pero al final del mes salía ajustado con los gastos.
“Una de esas cosas es el salario, digamos que él me ofreció 1000 colones pero resulta que llegando allá me quitaban 46% en impuestos, entonces ya quedaba la mitad del salario, ellos me decían que me iban a dar apartamento, carro, estudio para mí y mi familia, y cuando llegamos allá nada de eso me dieron entonces fueron cosas que tenía que costeármelas yo y se fue reduciendo lo que uno pensaba que iba a ser el bienestar de mi familia”, agregó.
Dado el alto costo para conseguirse un vehículo, decidió que no iba a alquilar uno y que iba a caminar todos los días hacia el centro del entrenamiento, tarea que resultaba muy complicada al tener que caminar durante 30 minutos a temperaturas bajo cero.
“Yo salía de la casa y solo se me veían los ojos, me ponía tres licras, cinco jackets, cuatro pares de medias porque era impresionante el frío que hace ahí”, contó.
Pero nada de eso podía traer abajo los sueños de Heiner Mora, el tema económico o de las comodidades no significaban nada si le hubieran ayudado a tener a su familia a su lado, petición que el club nunca le cumplió.
“Yo todavía no estaba casado con mi esposa, ellos me dijeron que iban a hacer los trámites para que estuvieran allá y nunca los hicieron entonces mi esposa tenía que estar yendo y viniendo con un hijo mío recién nacido y nunca pudimos estar estables”, indicó.
Todo esto se conjuntó y pusieron a Heiner Mora en un punto muy difícil de su vida donde llegó a considerar quitarse la vida, hoy agradece a Dios el no haber llegado a ejecutar esa acción.
“Los que viven en la nieve saben que es del trabajo a la casa y enciérrese a hacer nada, por lo menos la gente con familia llega a conversar con los chicos y tiene cosas que hacer, pero yo solo, llegaba a la casa, dormía, me iba a dar vueltas en la casa, volvía a tratar de dormir, no podía comunicarme muy bien con mi esposa y mis hijos por el cambio horario y uno en la soledad piensa en cosas feas, piensa en los problemas y uno llega al punto a pensar cosas que no son nada buenas para la vida de uno. Sí me pasaron un montón de cosas de esas, horribles y gracias a Dios no se dio, mi esposa me habló demasiado, me trató de alzar el ánimo y gracias a Dios no pasó a más”, comentó.
Llegaron los buenos momentos
Su estado emocional y la lejanía con su familia fue el punto de quiebre para Heiner Mora que pese a estar pasando un buen momento futbolístico, decidió regresar a Costa Rica en el 2013 donde el fútbol le sonrió ganando seis títulos nacionales con el Deportivo Saprissa. “Solo la oportunidad de haber jugado ahí me llenó de satisfacción porque era uno de mis sueños y yo le decía a mi papá le decía que mi sueño era ser campeón con Saprissa y se me dio ese suelo tan bonito en varias veces”, dijo.
Asimismo, Heiner logró asistir a la Copa del Mundo de Brasil 2014 en la que tuvo un momento muy difícil cuando una lesión lo sacó del evento a tan solo días de que comenzara, aun así, con la insistencia de los comapñeros decidió quedarse en la concentración y asistió a todos los partidos como parte de la delegación que acompañaba a Costa Rica junto con Álvaro Saborío, su compañero de celebración en esos cinco partidos que jugó La Sele.
Heiner Mora seguirá junto al equipo en el Mundial pic.twitter.com/d3QJhFazcS
— Gina Escobar (@GinaEscobarJara) June 11, 2014
Incluso recordó el gran gesto que tuvo el grupo con él y ‘Sabo’ pues a pesar de no formar parte de la nómina de 23 jugadores, los tomaron en cuenta en el premio económico que recibe cada selección por jugar el mundial.
“Fue un tema muy bonito de los líderes del equipo que antes que irnos al mundial ellos hicieron una reunión y nos dijeron que todos los que estábamos ahí íbamos a recibir la msima parte y yo todavía no me había lesionado, luego me pasó eso y yo dije ‘¿Ahora yo que? ¿Voy a ser parte de la fiesta?’ Y vieras que tuvieron ese gesto, me dijeron que iba a ser igual, que yo era parte del grupo y fue algo que me llenó mucho”, agregó Mora.
Su presente
Heiner Mora se encuentra alejado de las canchas desde hace nueve meses cuando dejó el Barrio México de la Liga de Ascenso y tomó la decisión de irse a vivir a Estados Unidos con toda su familia.
Aunque actualmente no está jugando fútbol, el ‘Titi’ todavía no toma la decisión de retirarse como jugador pues ha tenido acercamientos para desempolvar los botines y ser parte de un club semi profesional en Chicago, decisión que todavía está meditando.
“Todavía no he dado ese paso tan importante, si me ha pasado por la cabeza, lo curioso es que estando acá me han salido opciones de ir a jugar a equipos semi profesionales en torneos de la (USPL) United Soccer Premier League), estamos analizándolas todavía pero si me gustaría aprovecharla para dar lo último de mi sin el estrés que se da en lo profesional”, finalizó.
Heiner Mora jugó el fútbol de forma profesional durante 18 años en clubes como Santos, Brujas, UCR, Belén, Saprissa y Pérez Zeledón. Con la selección fue internacional en 24 oportunidades, incluyendo la Copa América del 2011 en la que los ticos enfrentaron a Colombia, Bolivia y Argentina.