Los rojinegros marchan en lo alto de la clasificación luego de vencer a Pérez Zeledón por marcador de 3-1
Vencer a los fantasmas del pasado es una de las misiones que se ha impuesto el camerino de la Liga Deportiva Alajuelense, esto incluye tanto a sus rivales como a situaciones extrafutbolísticas que se han presentado y que han jugado en contra de los rojinegros en las etapas más importantes del torneo.
El conjunto que dirige Albert Rudé vive épocas complicadas pues es viso como uno de los equipos favoritos para dejarse la copa, pero se ha caído en los momentos más importantes en los últimos dos torneos.
El aspecto psicológico ha sido uno de los puntos que los rojinegros han achacado como una de las causantes de que no lograran conseguir el objetivo tanto en el Clausura 2021 y el Apertura 2021.
En aquellos instantes, Alajuelense no pudo Saprissa en dos ocasiones, terminó cediendo en la final en la que eran favoritos y volvieron a hacerlo seis meses después.
Por eso ahora, buscan no solo reponerse en cuanto a su desempeño en cancha, también buscan fortalecerse de la cabeza para manejar las situaciones de crisis y de exigencia que se presentan en los juegos definitivos.
Bryan Ruiz señaló este mal en diciembre pasado al haber terminado fuera de la gran final en manos del Deportivo Saprissa y meses después reconoce que es un aspecto al que se le está haciendo énfasis dentro del camerino y el cuerpo técnico.
El capitán puso de ejemplo que este martes ante Pérez Zeledón empezaron perdiendo, pero no perdieron la calma y lograron reponerse y terminaron dejándose los tres puntos con un 3-1 definitivo.
“Para nadie es un secreto que seguimos trabajando en la parte mental del equipo fundamentalmente para que estemos bien en ese detalle que a veces se inicia perdiendo, hoy fue una prueba muy grande, empezamos perdiendo pero el equipo sigue haciendo lo mismo y en dos minutos le damos vuelta al marcador, ahí entendemos que el partido dura 90 minutos y un gol no va a marcar diferencia”, explicó Ruiz.
Albert Rudé se encuentra optimista con la curva de rendimiento que está sosteniendo Alajuelense y confía en que si siguen por esa línea podrán terminar líderes de la fase regular para luego ir por el premio mayor que es ganar la copa número 31.
“Nosotros nos estábamos metiendo en problemas no sacando los resultados para estar en la punta y despegar. Nos estábamos metiendo en una situación que no es buena, y teníamos que salir de ahí. Ya encadenamos tres victorias seguidas, eso es muy bueno”, manifestó el estratega que tiene a los liguistas en lo alto de la clasificación con 29 unidades.
Alajuelense pone sus ojos en dos compromisos de alto voltaje que serán contra Cartaginés, sublíder del certamen y posteriormente enfrentarán el clásico ante Saprissa.