Luis Diego Arnáez recomienda al estratega español no confiarse de que los morados se encuentran en una mala racha
Desde su llegada al banquillo de la Liga Deportiva Alajuelense en setiembre anterior, Albert Rudé y su equipo viven su mejor momento competitivo y buscarán reflejarlo este miércoles en el clásico ante el Saprissa.
Los últimos cuatro partidos de los rojinegros no solo han terminado en victoria, también han sido arrolladores y han conseguido unos resultados positivos que gustan al ojo de la afición que está viendo como los jugadores empiezan a llegar a su mejor forma física y deportiva.
En un conjunto erizo que había sido cuestionado todo este tiempo por si irregularidad, Rudé parece haber encontrado la fórmula con la que puede sobreponerse a sus rivales, teniendo muy en claro que todavía debe convencer a un sector que le exige superar a Saprissa y Herediano para dejar de ser incrédulos con él.
Luis Diego Arnáez, figura de autoridad en la Liga Deportiva Alajuelense en donde jugó en más de una década y al que dirigió en dos ocasiones, conversó con ESPN para analizar el presente del club y de la labor del entrenador, a quien ve que ya ha ido encontrando las piezas adecuadas para practicar un buen fútbol.
“Los últimos partidos han sido los mejores de la Liga, eso es indudable, por los juegos, los goles y diversos aspectos tácticos que se presentan en el campo de juego que hacen que el equipo juegue bien”, indicó.
Arnáez es tajante, el subidón de rendimiento en la Liga Deportiva Alajuelense se debe a que Rudé encontró un once estelar estable y abandonó las rotaciones, ya que anteriormente todos los jugadodres, salvo Giancarlo González y Alexis Gamboa, se encontraban constantemente cambiando de un juego a otro debido a que el estratega ve tener bastantes opciones en todas las posiciones del campo.
“Lo último que yo veía de la Liga es que aparecía un jugador joven y jugaba dos partidos buenos y a la banca, venia el otro fulano hacia uno o dos goles y luego a la gradería, por una bendita rotación que yo pienso que eso no da continuidad a los jugadores y perjudica al grupo, ahora es hora de darles continuidad para que lleguen fortalecidos a las finales y tengan más probabilidades de ganar el torneo”, comentó.
El ‘Flaco’ sabe lo que es convivir con la presión que se vive dentro de Alajuelense, una institución con muchos títulos en sus vitrinas y planillas candidatas a ganar al final del semestre pero que en los últimos años se ha quedado corta ganando solo un torneo en ocho años, esa presión ha afectado a más de un entrenador y jugador que han vestido la camiseta y a la que deben sobreponerse para conseguir lo que se espera de ellos.
“Esa es la presión que tiene todo técnico de la Liga, pero resulta que hace unos partidos no se le gana a Saprissa y eso genera una presión extra, tienen esa loza pesada encima y con eso el equipo tiene que jugar sobrio y con seguridad para que no afecte al juego, Rudé tiene que saber manejar esa presión porque ya no es ningún novato en Costa Rica, ya sabe lo que es el fútbol acá y la presión de la gente”, agregó.
El clásico de este miércoles es de contrastes, Alajuelense encuentra en la primera posición con 32 puntos, mientras que los morados son últimos con 16 unidades y el favoritismo está del bando de los jugadores de Albert Rudé, sin embargo, esto no es garantía de nada, en el juego de la jornada 6 en la que un gol de Jaylon Hadden inclinó la balanza para los josefinos.
“En los últimos años se ha dado con un equipo que anda bien y uno un poco abajo, independientemente de quien sea, lo que pasa es que en esta oportunidad llega la Liga que en los últimos partidos ha tenido un rendimiento muy bueno ante un Saprissa con un rendimiento que no se le veía en años en la parte baja de la tabla y con partidos perdidos tanto de local como visitante. No recuerdo en años una racha así de Saprissa…es muy difícil predecir el marcador, pero usted está bateando porque cualquier cosa puede pasar”, sentenció.
Alajuelense tiene tiene ocho clásicos consecutivos sin lograr derrotar al Deportivo Saprissa, cuatro de ellos bajo la dirección del técnico Albert Rudé.