Fabián Bustos, entrenador de Barcelona SC, habló en exclusiva con ESPN.com. El DT argentino analizó el ciclo de Gustavo Alfaro al frente de Ecuador, justificó la presencia del Kitu Díaz en la Selección Nacional, contó que se siente un ecuatoriano más y destacó el crecimiento de los entrenadores locales.
-Hace unos días hablamos con Pablo Repetto, DT de Liga de Quito, y admitió que lo sorprendió gratamente el inicio del ciclo de Alfaro en Ecuador. ¿La Selección también superó sus expectativas?
-A mí también me sorprendió para bien. Esperaba un muy buen trabajo pero los números fueron muy altos para la expectativa que teníamos todos y la forma en que se consiguió porque los partidos que ganó, los ganó muy bien. Es un mérito de él y su cuerpo técnico. Me sorprendió porque era un momento muy difícil, había mucho recambio, no había trabajo. Gustavo llegó y empezó a hacer microciclos, fue a ver partidos, recorrió el país. La forma de hablar con entrenadores, periodistas, con la gente de la selección y los futbolistas, lo ayudaron. Me parece que le supo llegar a los jugadores. Te puede gustar más o menos su disposición táctica pero lo que tiene es el gran manejo de grupo. Yo veo un equipo que, sin trabajo, de 4 partidos de Eliminatorias ganó 3.
-¿Le gustaría tener una carrera de entrenador como la de Alfaro?
-Ojalá que mi carrera sea como la de Gustavo Alfaro. Lo conozco de mi época como jugador en Argentina, año 94, él ya era entrenador de Atlético Rafaela. Conozco sus inicios, veo ahora todo lo que ha crecido y la tranquilidad que tiene para manejar la parte emocional, siempre fue un tipo muy culto, muy trabajador. Sus equipos han sido organizados, ordenados. Lo que ha hecho Gustavo con su carrera lo consiguió a base de sacrificio, de trabajo. Es un gran entrenador. Muy criticado porque los equipos grandes son así. No se critica a la persona, me pasó también a mí el año pasado. No critican a Fabián Bustos, critican al entrenador de Barcelona. Y a Gustavo en Boca le pasó algo similar.
-¿Dialoga seguido con Alfaro, qué enseñanzas le deja ese contacto?
-Gustavo te enseña un montón de cosas. Hablamos no tanto de lo futbolístico, él sabe todo de lo que pasa en los equipos. Los entrenadores tenemos mucha información estadística de los jugadores. Hablamos de la idiosincrasia del futbolista ecuatoriano. Cómo es el de la sierra, más retraído, físicamente fuertísimos; el de la costa, más parecido a los argentinos o brasileños, veloz, hábil, desinhibido; el de Manabí, más técnico pero con un biotipo no tan bueno, parecidos a los peruanos, a los colombianos. Los futbolistas de Argentina, Brasil, Uruguay antes sacaban ventaja por la parte emocional o la falta de formación. Hoy, te puedo asegurar que en capacidad física y técnica están a la par, y en muchos casos son superiores. Igual, aprendí yo más de Alfaro de que lo que él me escuchó a mí.
-¿Se imagina dirigiendo a Ecuador u a otra Selección?
-Es un sueño para mí dirigir una selección, pero también lo veo lejano hoy. Gracias a Dios, los últimos 3 o 4 años han sido muy buenos. Estamos en un camino ascendente y soñamos con llegar a eso.
-¿Cómo evalúa el debut de Kitu Díaz con Ecuador?
-En los medios hay una división, que siempre ha existido, porque el Kitu es una bandera de Barcelona y, obviamente, la gente de la sierra, de Independiente, de Liga, el mismo emelecista, muchos dicen que está grande. Yo lo vi, los minutos que jugó, muy bien. Él se siente muy cómodo. Se siente un ecuatoriano más. Alfaro ha hablado con los referentes de la Selección y lo han aceptado muy bien. Creo que lo lleva porque no hay un jugador ecuatoriano con esas características futbolísticas. Lo veo entusiasmadísimo con la Selección, jugando 1 minuto o lo que el entrenador diga. A los 34 años no tiene porqué hacer el esfuerzo que está haciendo para estar a la altura. Kitu viene de una año excelente y arrancó este año otra vez muy bien, lo acaban de elegir mejor jugador de marzo. Sigue marcando diferencia.
-Hace más de una década que vive en Ecuador, ¿Se considera un técnico extranjero o uno local?
-Yo soy argentino pero tengo hijas ecuatorianas, me encanta la comida ecuatoriana, mi esposa es ecuatoriana, tengo mi casa en Ecuador. Me siento ecuatoriano con costumbres argentinas. Tengo un poco de todo, las cosas buenas y malas de los dos lados. Mucha gente se queja de que al ecuatoriano se le dan pocas chances. Yo, con todo respeto, digo, la culpa es nuestra. Hay que prepararse, esforzarse. Este año creo que es el que más ecuatorianos hay en Primera, eso esta bueno. Está Paul Vélez en Delfín; Pool Gavilánez, un muy buen entrenador, en Guayaquil City; Pechón (Juan Carlos León) en 9 de Octubre y Geovanny Cumbicus en Mushuc Runa. La verdad, no depende de la nacionalidad, depende del rendimiento, de tu forma de trabajar y de los objetivos que plantee la dirigencia al cuerpo técnico.