Cuando ocurrió, ocurrió a toda velocidad. En la mañana de este domingo, el Real Madrid anunció que Karim Benzema dejaba el club y por la tarde, jugó su último encuentro vistiendo la camiseta blanca, que terminó en empate 1-1 con el Athetic Club. El delantero francés marcó un penal y fue inmediatamente sustituido para recibir la ovación de la multitud congregada en el Santiago Bernabéu.
El Madrid ya ha presenciado salidas de alto perfil, mientras esta plantilla que definió una era en el fútbol mundial llega al fin de su ciclo (Cristiano Ronaldo en 2018, Sergio Ramos en 2021 y Marcelo en 2022); sin embargo, esta baja estremeció mucho más los cimientos del club. Benzema (35 años) es el Balón de Oro reinante. También es capitán del club y anotó 354 goles para la causa del Madrid, superando a Raúl González Blanco y Alfredo Di Stéfano, siendo solo superado por Cristiano, que totaliza 451 goles. Su récord de 25 trofeos incluye cinco trofeos de Champions League.
Y ahora, después de 14 años, parte con rumbo al club Al Ittihad de Arabia Saudita. Deja atrás esas estadísticas, pero más allá de ello (La verdad, el juego de Benzema nunca fue cuestión de estadísticas) deja recuerdos y momentos, la obra de un jugador que hacía que el balompié pareciera arte. Las imágenes de Karim bailando para desbordar tres defensores del Atletico Madrid en 2017, ejecutando una chilena perfecta contra el Ajax en 2012 o liderando una remontada que desafió la lógica ante el Paris Saint-Germain en la pasada edición de la Champions League.
A year since this Benzema hat-trick ⚽️⚽️⚽️@Benzema || #UCL pic.twitter.com/Ru8BHkoLi0
— UEFA Champions League (@ChampionsLeague) March 9, 2023
Benzema, que llegó al Madrid siendo un joven tímido e introvertido de 21 años (con cuestionamientos hacia su potencial goleador hasta de su entonces DT Jose Mourinho), se convirtió en el subestimado eje de grandes plantillas del Real Madrid, alzando tres títulos consecutivos de Champions League antes de asumir el protagonismo y convertirse en la figura principal, ascenso que culminó con su Balón de Oro.
Sin embargo, la temporada 2022-23 fue toda una decepción. Benzema finalmente empezó a mostrar su edad, y a pesar de que sus estadísticas seguían siendo óptimas (incluyendo 19 goles en LaLiga), la sensación de esa excelencia discreta, de ser no sólo mejor que el resto sino también jugar un deporthttps://twitter.com/ChampionsLeague/status/1518883079196188674?s=20e totalmente distinto, le había abandonado.
ESPN ha conversado con fuentes cercanas a Benzema y el club, con la intención de comprender mejor esta etapa final de su paso por el Real Madrid, desde el tope personal de un Balón de Oro hasta una temporada final complicada, la decisión de aceptar la oferta de Arabia Saudita y cómo los planes de sucesión cuidadosamente trazados por el Madrid para 2024 quedaron patas arriba.
Con información adicional de Julien Laurens y Rodrigo Fáez.
Para muchos futbolistas, alzar el Balón de Oro marcaría el inicio de una fase novedosa de su carrera, llena de triunfos. En retrospectiva, para Benzema parecía ser el inicio del fin. Su temporada 2021-22 fue tan notable e improbable (marcando 27 goles en liga y 15 en Champions, alcanzando topes personales a la edad de 34 años) que quizás el bajón era inevitable. Su cuerpo había sido exigido hasta el límite, con 50 partidos disputados durante aquella campaña entre club y selección, al punto de que Benzema estaba convencido que la fuerte carga de trabajo tuvo consecuencias negativas en la temporada 2022-23, según indican fuentes a ESPN.
Benzema fue titular en los primeros cuatro partidos de la temporada de liga 2022-23, sufrió una lesión de isquiotibiales y estuvo ausente por un mes. Volvió, jugó otros cinco encuentros (marcando en la victoria 3-1 en el Clásico ante Barcelona en octubre y recibiendo el Balón de Oro en París al día siguiente) antes de volverse a lesionar el 21 de octubre.
Era un momento complicado: a menos de un mes de la esperada convocatoria para la selección de Francia que jugaría el Mundial de Qatar, Benzema tenía poco tiempo para recuperarse. El delantero disputó solo un partido con el Madrid en aquel momento, como suplente en el segundo tiempo en el triunfo 5-1 sobre Celtic en fase de grupos de la UEFA Champions League.
¿Trabajaba con tesón para recuperar su forma física o se mantenía reservado para el torneo internacional más importante de su carrera, tras haber pasado seis años exiliado de su selección entre 2015 y 2021? De cualquier forma, quedar fuera del seleccionado galo de Didier Deschamps (luego de sufrir una lesión de piernas en un entrenamiento el pasado 19 de noviembre) fue devastador. El torneo debió haber sido la oportunidad de Benzema para confirmar su jerarquía como el mejor del mundo y dueño del Balón de Oro. Por el contrario, fue considerado como una pieza prescindible.
Varias fuentes indican a ESPN que Benzema estaba convencido de que pudo haber jugado posteriormente en la competición si Deschamps lo llamaba a jugar. Posteriormente, el jugador calificó al técnico de "payaso" y "mentiroso" en redes sociales.
Luego de la decepción mundialista (Francia quedó subcampeona luego de caer ante la Argentina de Lionel Messi y compañía en tanda de penales, con el hat trick de Kylian Mbappe forzando a definir el partido desde las penas máximas), Benzema volvió a LaLiga, decidido a demostrar su valía. Convirtió 12 goles en los dos meses posteriores a la Navidad, incluyendo un doblete en la victoria blanca 5-2 en la visita al Liverpool del 21 de febrero, replicando el nivel mostrado en la Champions el año anterior.
El momento más destacado de la temporada llegó en la Copa del Rey, cuando Benzema marcó hat trick en el triunfo 4-0 sobre Barcelona en el Camp Nou el 5 de abril. En aquel momento, el Barça ya se había escapado en la pelea por el título de LaLiga. Poco después, el Madrid recibiría un baño de humildad por parte del Manchester City en la Champions. Benzema fue titular en ambos partidos de la semifinal contra el equipo de Pep Guardiola, causando poca repercusión mientras que el equipo español fue apaleado 5-1 en el global.
El Madrid quedó en un distante segundo puesto en LaLiga, a 10 puntos por debajo del Barcelona. Cayó en semifinales de Champions League mientras alzó la Copa del Rey, Supercopa de la UEFA y Mundial de Clubes. Las estadísticas goleadoras de Benzema fueron las peores para él desde 2018. Pero nadie entraba en pánico. Varias fuentes han indicado a ESPN que ambas partes habían pactado una extensión contractual de un año para mantener a Benzema vinculado al club para una última incursión en 2023-24.
Sólo faltaba la firma.
Benzema no dejaba muchas pistas en público sobre su futuro. No es muy dado a conceder entrevistas y sólo ha comparecido una vez en ruedas de prensa en lo que va de 2023. En aquella ocasión, durante la previa de la final de la Supercopa de España, celebrada en Arabia Saudita el 14 de enero, se cuidó de no comprometerse a nada.
"Estoy en el Real Madrid", expresó. "Para mí, asumo las cosas año tras año. No puedo decir cuánto tiempo estaré aquí. Puedo decirte que disfruto cada día… uno nunca sabe qué pasará en el fútbol".
Detrás de cámaras, varias fuentes afirman a ESPN que la aparente indecisión de Benzema a la hora de firmar su renovación despertó las sospechas de algunos. Si el jugador, el club y el técnico Carlo Ancelotti estaban de acuerdo, ¿por qué la demora?
Benzema se enteró del interés de los saudíes a principios de este año. El agente Karim Djaziri, que ha representado a Benzema desde que tenía 16 años, mantenía contactos con la Saudi Pro League, a través del vicepresidente del Al Ittihad Ahmed Kaaki.
Los saudíes tienen grandes planes dentro del fútbol. Cristiano ya juega con el Al Nassr. Han contactado a Benzema, Messi, Sergio Ramos, Luka Modric y otros jugadores para conocer su interés en mudarse al Medio Oriente. Al inicio, Benzema no mostraba mucha atracción por la idea (se sentía listo para jugar otra temporada al máximo nivel), pero no rechazó la propuesta de inmediato.
A medida que avanzaba la temporada de LaLiga, Benzema empezó a hacer preguntas. Su nivel frágil y condición física no le ayudaban, pero aún se sentía dispuesto a quedarse en el Madrid.
Los saudíes empezaron a incrementar la presión sobre Benzema, mejorando su oferta en mayo pasado. En varias conversaciones telefónicas, se mostraron dispuestos a aceptar todas y cada una de las exigencias que se le ocurrían a Benzema, como el deseo de contratar a su entrenador físico personal. El 30 de mayo, ESPN informó por primera vez que Benzema estaba meditando sobre su futuro. Tras sostener conversaciones con su entorno, amigos y compañeros, decidió aceptar la oferta árabe.
La última propuesta contractual del Al Ittihad estaba valorada en la sorprendente cifra de €400 millones: €172 millones en sueldo más bonificaciones. El presidente del Al Ittihad Anmar Al-Halifi y el vicepresidente Kaaki viajaron a Madrid para proseguir las discusiones, aspirando a cerrar el trato en persona.
Había llegado la hora de informar al Madrid, y particularmente a su presidente Florentino Pérez, que siempre ha sido el máximo simpatizante de Benzema.
Se sostuvieron dos conversaciones con Florentino, que hizo todo lo posible para convencer a Benzema de que se quedara. La primera se produjo el 31 de mayo en la Ciudad Real Madrid de Valdebebas, con la presencia de Benzema, su agente Djaziri, Florentino y Juni Calafat, jefe scout del club. Benzema y Djaziri informaron a Florentino que el jugador había tomado una decisión definitiva. Florentino les pidió un día para reconsiderar.
Volvieron a reunirse el 1º de junio y el club conoció que Benzema no había cambiado de opinión. Florentino se enfadó, consciente de lo que esto implicaba para la planificación cuidadosamente hecha por el club con miras a la próxima temporada. ESPN informó que Benzema había decidido dejar el Madrid. Al mismo tiempo, varios periodistas cercanos al club recibieron la información de que esta noticia no era cierta, de que la extensión contractual de Benzema hasta 2024 había entrado en vigor y que no se iría.
Haciendo la situación más incómoda, Benzema tenía programado hablar en público esa misma tarde, mientras recibía el premio "Leyenda" otorgado por el diario deportivo Marca. No quería confirmar la noticia, mejor esperar al fin de semana y el último partido de la temporada del Madrid, y tenía una respuesta preparada para la pregunta inevitable. "¿Por qué hablaría de mi futuro, si estoy en el Madrid?", afirmó. "Habla internet. E internet no es la realidad". Mientras tanto, con Marca informando la permanencia de Benzema, el club ya empezaba a producir videos de despedida para cuando se diera a conocer su salida.
Benzema se sentía tranquilo con su decisión, según indican fuentes a ESPN. No quería arriesgarse a perjudicar su legado con otra temporada decepcionante y con su Madrid en plena transición, consideraba que había llegado el momento adecuado. También se sintió conforme con su discreta despedida del Bernabéu del pasado domingo. No hubo discursos ni gestos grandilocuentes. No obstante, Benzema jugó, marcó y fue ovacionado por la multitud.
En un íntimo evento de despedida celebrado en Valdebebas el pasado martes, Benzema dio un breve discurso de tres minutos. Agradeció a Florentino, Ancelotti y a la afición, calificándolo como "un día triste".
"Me voy de este club y eso me duele", indicó Benzema. "Tuve el sueño de fichar por el Madrid y quería terminar [mi carrera] en el Madrid, pero a veces la vida te da otras oportunidades".
Ahora, Benzema tiene su atención centrada en Arabia Saudita. Varias fuentes indican a ESPN que Benzema ya ha sostenido conversaciones con el técnico del Al Ittihad Nuno Espirito Santo (ex entrenador del Valencia, Wolverhampton Wanderers y Tottenham Hotspur) para conocer el proyecto deportivo del club. Mantendrá su residencia en Madrid, que considera como su hogar a largo plazo y aspira ganar trofeos: la AFC Champions League o el Mundial de Clubes, en el que probablemente un día el Al Ittihad se enfrentará al Real Madrid.
De todos modos, este sería un verano ajetreado para el Real Madrid, que tiene planes de reforzar su defensiva, mediocampo y ataque, incluso cuando creían que seguirían contando con Benzema.
La Casa Blanca ha centrado sus esfuerzos en fichar al mediocampista de la selección de Inglaterra Jude Bellingham, proveniente del Borussia Dortmund en una operación oficializada por el club alemán este miércoles. También se pactó el regreso del veloz lateral izquierdo Fran Garcia (canterano del Madrid) proveniente del Rayo Vallecano, y también están cerca de fichar al delantero español Joselu, que convirtió 16 goles esta temporada con el descendido Espanyol.
Sin embargo, la intención era convertir a Joselu en suplente de Benzema, no su sucesor. Además, Benzema no es el único artillero en irse del Madrid. El club confirmó este fin de semana que Marco Asensio, Eden Hazard y Mariano Diaz también partirán de la Casa Blanca. Eso deja a Vinicius Junior y Rodrygo como los únicos atacantes del primer equipo del Madrid.
Brahim Diaz, que vuelve tras pasar tres años cedido al AC Milan, llenará la vacante dejada por Asensio, mientras que Joselu es una mejora significativa en comparación con un Mariano que había perdido nivel de forma sustancial. Por otra parte, el Madrid no había olvidado su objetivo por largo tiempo de fichar a Kai Havertz (que querían asegurar antes de que dejara el Bayer Leverkusen con rumbo al Chelsea en 2020), considerándolo como un delantero versátil capaz de aportar en cualquier posición a la delantera.
Varias fuentes han indicado a ESPN que Harry Kane es el jugador identificado por el club como el mejor sustituto disponible para Benzema en estos momentos. Sin embargo, persisten dudas sobre su edad (la figura del seleccionado inglés cumple 30 años el próximo mes) y un tentativo pase por €300 millones, aparte de la posibilidad de largas y agotadoras negociaciones con el Tottenham. (Florentino tiene experiencia de primera mano negociando con el presidente de los Spurs Daniel Levy los fichajes de Modric en 2012 y Gareth Bale en 2013)
En líneas generales, la decisión de Benzema ha alterado la estrategia madridista para el mercado de verano. Reemplazar a Benzema ahora mismo, con un jugador de la calidad necesaria para jugar en un club de la talla del Madrid y que represente una amenaza constante de 25 goles por temporada, no formaba parte de los planes ni estaba en el presupuesto. También complica el escenario soñado de los exitosos fichajes de Mbappé y Erling Haaland para 2024 y estrenar el nuevo Bernabéu, ya que se han apartado recursos que ahora deberán ser invertidos en un artillero este mismo verano.
Gracias a Benzema, lo que había sido hasta ahora una transición meticulosa y bien ejecutada con Vinicius, Rodrygo, Eduardo Camavinga, Eder Militao, Aurelien Tchouameni y otros jugadores considerados como el presente y futuro del Real Madrid, ahora deberá acelerarse para concretarla antes de lo previsto.