El tradicional Trofeo Joan Gamper no se disputará en el nuevo Camp Nou, tal como había sido anunciado previamente en un spot publicitario protagonizado por Joan Laporta. Sin embargo, el rival se mantiene: el Como, dirigido por el exjugador blaugrana Cesc Fàbregas.
Solo unos pocos podrán presenciar el encuentro en vivo, ya que se jugará en el Estadi Johan Cruyff, con una capacidad de 6.000 espectadores. Aun así, como cada año, el evento servirá para presentar oficialmente ante la afición la plantilla del Barcelona para la temporada 2025-2026, tras haber conquistado el triplete nacional en la campaña anterior: LaLiga, Copa del Rey y Supercopa de España.
Además de Fàbregas, otro viejo conocido volverá al escenario culé: el ex capitán Sergi Roberto, quien se reencontrará con varios de sus antiguos compañeros. A quien no podrá saludar en el campo será a Marc-André ter Stegen, recientemente operado de la espalda. El arquero alemán atraviesa una evidente “guerra fría” con el club, que, sin hacerlo oficial, le abrió la puerta de salida con la contratación de Joan García y la renovación de Wojciech Szczęsny.
Boca, el más invitado... ¿y Chacarita, el mejor argentino?
La última participación de un club argentino en el Joan Gamper fue en 2018, cuando Boca Juniors cayó 3-0 frente al Barcelona de Lionel Messi. Guillermo Barros Schelotto fue el DT xeneize y alineó a: Esteban Andrada; Julio Buffarini, Carlos Goltz, Cristian Izquierdoz, Lucas Olaza; Nahitan Nández, Wilmar Barrios, Emanuel Reynoso; Sebastián Villa, Ramón Ábila y Edwin Cardona.
Por su parte, Ernesto Valverde mandó a la cancha a: Ter Stegen; Sergi Roberto, Gerard Piqué, Samuel Umtiti, Juan Miranda; Arturo Vidal, Ivan Rakitić, Philippe Coutinho; Malcom, Lionel Messi y Munir.
Los goles fueron convertidos por Malcom, Messi y Rafinha Alcántara (hermano de Thiago), en un encuentro que marcó la sexta participación de Boca en el Gamper, consolidándolo como el club argentino más invitado al torneo que lleva el nombre del fundador del Barça.
Diez años antes, en 2008, el duelo fue mucho más parejo: Boca ganaba 1-0 al minuto 73 con gol de Lucas Viatri, pero el Barça de Pep Guardiola lo dio vuelta con goles de cabeza de Carles Puyol (88') y Samuel Eto’o (90').
Boca también protagonizó una de las mayores goleadas en la historia del torneo, al caer 9-1 en la edición de 1984.
Otros clubes argentinos también tuvieron presencia: San Lorenzo participó tres veces (1973, 1995 y 1996), siendo finalista en las dos últimas. Estudiantes de La Plata (1969) y River Plate (1980) finalizaron últimos en sus respectivas ediciones.
Cabe recordar que desde la creación del torneo en 1966 hasta 1996, el formato era cuadrangular. Desde 1997, se disputa a partido único.
La mayor hazaña argentina fue obra de Chacarita Juniors, que en su única participación (1971) venció 2-0 al Bayern Múnich de Beckenbauer en semifinales. Aunque perdió la final 1-0 ante el Barcelona, su actuación rozó la épica. Hasta hoy, solo un equipo no europeo ha ganado el torneo: Internacional de Brasil en 1982.
Un Gamper gris en el inicio de Flick
El debut de Hansi Flick en el Joan Gamper 2024 no fue el esperado: el Barcelona cayó 3-0 ante Mónaco, en un partido donde el equipo mostró más dudas que certezas. Esa derrota puso fin a una racha de 11 triunfos consecutivos en su propio torneo.
Pese al tropiezo, el técnico alemán tomó nota y corrigió rápido: tras ese partido, el Barça no volvió a perder por más de dos goles en ninguno de los 60 encuentros oficiales que disputó en la temporada 2024-2025.
Lejos del impacto mediático del Gamper 2003, que marcó el debut de Ronaldinho, la edición 2025 también tendrá sus atractivos: el debut ante su gente de Lamine Yamal con el dorsal número 10, la presentación ante el público de los dos fichajes estrella: Marcus Rashford y el arquero Joan García, ambos ya con minutos en la gira por Japón y Corea del Sur. Sin olvidar la incorporación del joven Roony Bardghji, que podría hacerse un cupo dentro del equipo grande
El Trofeo Joan Gamper no se jugará nuevamente en el Camp Nou, pero su esencia sigue intacta. Desde Chacarita venciendo al Bayern hasta Fàbregas regresando como DT rival, pasando por la irrupción de Lamine Yamal como nuevo símbolo culé, el Gamper es más que un partido: es un puente entre generaciones, culturas y estilos. Como dijo su fundador, “Queríamos que el Barça fuese catalán, suizo, inglés, alemán… universal.” Y lo logró.