De manera sorpresiva y tras un breve paso por el fútbol de Grecia, el mediocampista Erik Lamela anunció este jueves que le ponía punto final a su carrera. Después de haber quedado libre a mediados del año pasado en Sevilla, Lamela decidió continuar su carrera en el AEK Atenas, pero este jueves el club comunicaba en redes sociales que el jugador terminaba su contrato, ya que había decido retirarse.
Con 16 temporadas jugadas, Lamela decidió finalmente ponerle punto final a una carrera y en un extenso posteo en su cuenta personal de Instagram, el ahora ex futbolista de 33 años explica sus razones y el que encabeza de la siguiente forma: "Hola a todos. Les quiero contar que tomé la decisión de terminar con mi carrera profesional, es una decisión que la pensé mucho tiempo y, bueno, finalmente llegó la hora"
Lamela y su lesión crónica en las caderas
Lamela, en su posteo, se refirió a sus problemas físicos para justificar la difícil decisión de retirarse a los 33 años: "Para los que no saben tengo problemas en las caderas, hace 11 años que comenzaron y en el 2017 fui operado de ambas, siendo la izquierda la más afectada. Fue un año difícil, tenía mucho miedo... pensé que podía ser el final de mi carrera y tenía 25 años. Luego de que salieran bien las operaciones me dieron cuatro años más de carrera. Me dijeron que con el tiempo iba a volver a empeorar y eso es lo que estoy viviendo ahora".
El jugador siguió contando su padecimiento en la despedida que colgó en sus redes: "Con mucho sacrificio, pasando horas con fisios, fortaleciendo en el gimnasio, infinitas inyecciones y tratamientos, logré jugar más del doble. Eso sí, fue un esfuerzo que solo los que estuvieron cerca lo saben realmente. Nada fue fácil. Tener dolor, jugar y entrenar con molestias pasó a ser algo normal en mi día a día. Hace cinco años que tomo pastillas antes de cada partido para poder competir en mejores condiciones, empezando con la menor dosis y este último tiempo tomando el máximo ya dos días antes del partido para poder estar. Hoy decido ponerle fin a todo esto, hoy se termina todo este esfuerzo. Este año fue muy difícil para mí ir a cada partido entrenándome en la bicicleta y en el gimnasio. Aprovecho para agradecer en público a Matías Almeyda por permitirlo y a mis compañeros por aceptarlo".
Indudablemente la salida de Almeyda del club griego cambió el panorama y se precipitó la decisión: "Este año cambiaron las cosas, no aceptaron mi manera de entrenar y lo entiendo perfectamente, por eso mi acuerdo mutuo con el club para terminar de la mejor manera. De esta manera esto se termina, tengo la tranquilidad de haber ido hasta el final y de no haberme guardado nada. Gracias al fútbol conocí lo que es subirse a un avión. Conocí distintos países, culturas, religiones... conocí lugares y viví momentos que jamás hubiese imaginado".
Y obviamente no faltaron los agradecimientos: "Quiero agradecer a todos los clubes donde jugué por haber confiado en mí y abrirme las puertas de sus países. A River que fue el que me formó dándome desde la comida hasta una escuela, no me olvido de nada, tengo memoria de quienes me ayudaron. Nada de todo lo que logré hubiese sido posible sin ustedes. Agradezco a todos los trabajadores que se cruzaron por mi camino, a mis ex compañeros y entrenadores, fisios, a toda mi familia, a mi agente Pablo Sabbag por haberme acompañado toda mi carrera, a mis padres por estar siempre y por haberme llevado a cada partido y entrenamiento cada vez que podían para que pudiera llegar a primera.
A mi mujer incondicional por haber estado durmiendo a mi lado en la cama del hospital, incluso en mis peores momentos... por haberme ayudado día a día este último tiempo. A mis hijos, que son mis fans número 1, que fueron mis fuerzas y energía para seguir adelante. Los amo. Se termina este viaje que lo disfruté muchas veces y otras no tanto pero sin duda que el fútbol me enseñó a ser una persona más fuerte y a no bajar los brazos nunca. Una parte de mí está triste porque ya no voy a jugar más profesionalmente.
Salir a la cancha, levantar la cabeza y ver a la gente, festejar un gol, disputar una pelota... es una adrenalina que difícilmente la vuelva a encontrar en mi cuerpo. Dejar lo que me apasiona y lo que hice durante casi toda mi vida. Otra parte de mí siente alivio, hoy me quito esa mochila tan pesada que significa tener que estar cada partido sin importar en las condiciones que esté. De tener que estar concentrado con dolor y saber que un estadio lleno me espera para exigirme en cada pelota. Me acostumbré a eso, pero a partir de hoy cuidaré de mi salud.
Estoy orgulloso de cómo terminé esta temporada, compitiendo y marcando goles en partidos importantes a pesar de todo. Son recuerdos que estarán por siempre en mi corazón y en mi cabeza. Gracias fútbol por todo lo que me regalaste y por supuesto gracias a toda la gente que me apoyó todo este tiempo y sobre todo a los que disfrutaron viéndome jugar!
Gracias River Plate, Roma, Tottenham Hotspur, Sevilla y AEK, tendrán por siempre un lugar en mi corazón".
Con tan solo 17 años, en el Torneo Clausura 2009 Erik Lamela debutó con la camiseta de River, equipo en el que permaneció hasta mediados de 2011. Si bien a lo largo de esas dos temporadas fue uno de los jugadores más destacados, no logró ganar títulos con el club.
A mediados de 2011, luego de perder la promoción contra Belgrano y consumarse el descenso del Millonario a la Primera B Nacional, Lamela se marchó del club a cambio de 12 millones de dólares a la Roma, equipo que compró la totalidad de su pase.
La carrera de Erik Lamela
Desde el 2011 hasta esta temporada, Lamela se desempeñó en el viejo continente. Su primer destino fue la Roma, equipo en el que jugó hasta mediados de 2013, donde mantuvo un buen rendimiento al convertir 21 goles en 67 partidos disputados.
Gracias a esto, fue transferido al Tottenham para la temporada 2013/14. En el elenco inglés fue donde más jugó en Europa, ya que permaneció por 8 años. 257 partidos y 37 goles son sus números en los Spurs. Además, allí ganó dos veces el premio al mejor gol del año en la Premier League.
Por otro lado, gracias a un verdadero golazo de rabona que marcó en 2021 con la camiseta del Tottenham en el clásico frente al Arsenal, ‘Coco’ obtuvo el Premio Puskás entregado por la FIFA al mejor tanto de la temporada, logrando así un galardón que nunca pudo ganar Lionel Messi a pesar de tres nominaciones.
Tras el paso por el elenco inglés, en 2021 fue transferido al Sevilla, club en el que permaneció por tres años y se consagró campeón de la UEFA Europa League 2022/23, en la que Gonzalo Montiel metió el penal definitorio en la final ante la Roma.
En su último año, defendió los colores del AEK de Atenas, en donde también mostró un buen nivel, ya que convirtió 6 goles en 31 partidos. En su despedida del club en las redes sociales, recibió el reconocimiento de los hinchas por su labor.
Con la Selección Argentina disputó 25 encuentros, en los que convirtió tres tantos y formó parte del plantel subcampeón de la Copa América 2016, que se llevó a cabo en Estados Unidos.
⚽ ¡SIEMPRE DEJÓ SU HUELLA! Erik Lamela se retiró a los 33 años con estas estadísticas de goles por cada club que pasó pic.twitter.com/1OvzG7jo9B
— SportsCenter (@SC_ESPN) August 14, 2025
