BARCELONA -- Rafinha Alcántara, de 22 años y que cumple su segunda temporada como futbolista del primer equipo del FC Barcelona tras su cesión al Celta, ampliará su contrato hasta junio de 2020, cerrándose así la duda que existía respecto a su futuro en el club.
El centrocampista brasileño prolongará su contrato por otras cuatro temporadas y su cláusula de rescisión aumentará hasta los 75 millones de euros, entendiéndose así la confianza que existe en el cuerpo técnico en su futuro.
El Barcelona anunció este lunes el acuerdo, por el que Rafinha verá aumentado su salario anual por encima de los 2,8 millones de euros fijos con unos bonos que en el mejor de los casos podrían significarle al futbolista cerca de 4,5 millones.
El jugador acababa su contrato en 2016 y a pesar de todos los mensajes que daban por sentenciada su continuidad en el Camp Nou, el acuerdo de renovación no se concretaba tal y como esperaba su entorno, hasta que la lesión que sufrió a principio de temporada provocó que la directiva del club anunciase que aceleraría los contactos para asegurar su permanencia.
Apadrinado directamente por un Luis Enrique que se lo llevó al Celta en la temporada 2013-14 y pidió expresamente su retorno al Camp Nou cuando fue presentado como entrenador azulgrana, Rafinha ha disputado 45 partidos oficiales con el Barça y tres semanas antes de lesionarse en Roma debutó con la selección absoluta de Brasil, el cinco de septiembre en un amistoso frente a Costa Rica.
Hermano de Thiago, que en el verano de 2013 abandonó el Barça para fichar por el Bayern Múnich por deseo de Pep Guardiola, Rafinha es visto en Barcelona como el mejor representante de la última generación del fútbol base, llamado a liderar el equipo azulgrana en los próximos años.
