BARCELONA -- Leo Messi renovará su contrato con el Barcelona pero no lo hará, oficialmente, antes del mes de julio. A falta de concretar lo que se ha dado por llamar “pequeños detalles”, el nuevo compromiso del delantero argentino con el Barça, que se extenderá hasta junio de 2022, se firmará muy probablemente cuando haya comenzado la próxima temporada, aseguraron a Jordi Blanco, de ESPN Digital, fuentes cercanas que conocen de la negociación.
Cuestión de balances, el club entiende (y los asesores del futbolista lo comprenden) que la dimensión económica que significará el nuevo contrato de Leo debe ser incluido a partir del presupuesto del próximo ejercicio para no afectar al cuadre del que se cierre el cercano 30 de junio. Algo similar a lo que ocurrirá con la renovación con Ter Stegen, cuya negociación está “muy avanzada” de acuerdo a personas cercanas al club azulgrana.
Más allá de las discusiones propiamente dichas en todos los detalles del nuevo contrato de Messi, en el Barça existe total coincidencia en la necesidad de imputarlo a partir del balance de la temporada 2017-18 y repartir su alto costo en las siguientes cinco campañas.
Ese coste, en términos financieros, apunta a una prima de renovación que se calcula alrededor de los 40 millones de euros y un salario neto por temporada que varía según las fuentes contactadas pero que en cualquier caso alcanzaría los 200 millones de euros por los cinco años de contrato, ya fuera en una cantidad fija anual o ascendente con el paso de las temporadas.
En la última memoria económica del Barcelona, la pasada temporada, se incluyó una partida de 64 millones de euros calificada como ‘gastos de personal’ y que dividida hasta 2021 no era más que la prima de renovación que el club pactó con los agentes de Neymar, Busquets y Mascherano en la renovación de sus contratos.
En la próxima, se supone, habrá que especificar la que reciba Messi… Además de las que se acordaron con Luis Suárez, Rakitic y, si procede, con Ter Stegen, ya sea hasta ese mismo 2021 o un año después, como en el caso del crack argentino. Quiere eso decir que el Barcelona driblará el cada vez más problemático techo salarial de la plantilla, aunque tenga que hacer frente a unos gastos que empiezan a ser producto de discusión en el club.
Centrada toda la atención en la inminente final de Copa que enfrentará al Barça con el Alavés y fijada la mirada en la sucesión de Luis Enrique, esperándose al anuncio de Valverde como nuevo entrenador, la renovación de Leo Messi sigue cocinándose con paciencia en el Camp Nou.
“Renovará” se repite sin ápice de duda desde el club. Lo hará, sí, pero aunque pudiera anunciarse el acuerdo en las próximas semanas no sería, oficial con firma incluída, hasta que haya comenzado la próxima temporada.