BARCELONA -- Paulinho Bezerra, presentado por el FC Barcelona en el mes de agosto de 2017, está a un paso de volver al Guangzhou Evergrande, que negocia con el club azulgrana una sorprendente recompra que le significaría un beneficio estimado de 10 millones de euros.
Para el Barça, en caso de confirmarse, la operación significaría un negocio indiscutible, puesto que no solo recuperaría los 40 millones que pagó en su momento por su fichaje, sino que cubriría sobradamente el salario que ingresó en su única temporada y dejaría unas ganancias difíciles de rechazar en el momento actual del club.
El mediocampista brasileño, cercano a cumplir los 30 años y que se convirtió en su momento en el cuarto fichaje más caro de la historia del Barça, admitió minutos después de la eliminación de la canarinha en el Mundial que su futuro estaría lejos del Camp Nou, aunque dejando la puerta abierta a su continuidad a la espera de cómo se desarrollen unas negociaciones que, solventó su agente, están en marcha.
“Tengo una oferta de China y también de otro club europeo” explicó Paulinho, aclarando que en los próximos días “decidiré mi futuro”. A pesar de que el jugador cerró sus declaraciones aclarando que “no descarto seguir en el Barça”, fuentes solventes muy cercanas al Barcelona reconocieron a ESPN que en el club se considera mucho más probable su traspaso que su permanencia en la plantilla de Valverde.
Presente en 49 de los 59 partidos oficiales que disputó el Barça la última temporada (27 de ellos como titular), el jugador brasileño fue una pieza tan importante en los planes del entrenador como discutida desde el entorno, presentado como un jugador alejado de la idea futbolística del club y que entendería que la inminente llegada de Arthur y el interés conocido por incorporar a otro jugador de diferentes características a las suyas le reducirían su status en el equipo.