BARCELONA -- El Barcelona acelera la búsqueda de un delantero con quien ocupar la plaza dejada por Munir y para resguardar a Luis Suárez, con el que se mantiene la idea de darle descanso en la medida de lo posible. Un ‘9’ dispuesto a tener un protagonismo escaso y puntual hasta final de temporada si, como se pretende en primera instancia, el jugador elegido llegase cedido en una operación similar a la de Jeison Murillo.
La posibilidad de dar la oportunidad a un jugador del Barça B, por más que lo insinuase Valverde, se entiende muy remota, atendiendo al pasado reciente del club, donde prima tanto el rendimiento inmediato como la poca confianza ofrecida a los futbolistas de la cantera.
Argumentada la salida de Munir por la decisión del club de apartarle del plano por no querer renovar y tratar de obtener un mínimo beneficio económico, el Sevilla acordó pagar 1.2 millones de dólares por el traspaso, pero la deseada llegada de otro ‘9’ que venga a ocupar el rol de secundario que durante la primera mitad de la temporada tuvo el canterano descubre que el cambio al Barcelona acabará suponiéndole un gasto mayor que el ingreso, más teniendo en cuenta el supuesto finiquito que el club azulgrana habrá tenido que abonar al delantero madrileño por adelantar en medio año su marcha del Camp Nou.
MÍNIMO RIESGO
En la idea con la que trabaja el área deportiva del Barça la prioridad es encontrar un jugador que conozca la Liga española, cedido a buen precio por su club de origen, buen rematador y conforme a convertirse en suplente habitual y dispuesto a firmar solo hasta final de temporada, por más que en el acuerdo pudiera establecerse, como en el caso de Murillo, una opción de compra.
La dificultad de hallar a un futbolista que cumpliera todos estos parámetros, y también de un club dispuesto a negociar con el Barcelona, provoca que de alguna manera se amplíe el horizonte más allá del campeonato español, ampliándose el radar a los principales campeonatos europeos aunque, igualmente, sabiendo que no es una búsqueda sencilla por la máxima exigencia y mínima garantía de futuro que se ofrece al candidato y el nulo beneficio para el club de procedencia.
Munir, en la primera mitad de la temporada, participó en 11 de los primeros 27 partidos del Barça, sumando apenas 395 minutos, completando 2 partidos de los 4 en que fue titular y marcando dos goles. A partir de ahí se puede sospechar el papel que esperaría a su sustituto en la plantilla, rebajándose al mínimo la opción de que el elegido pudiera ser un jugador del Barça B.
El joven Abel Ruiz, de 18 años y que tras conquistar la Youth League el pasado curso con el juvenil prolongó su contrato con el Barça hasta 2021 con uno de los salarios más altos pagados nunca en el filial azulgrana, sería una de las opciones a manejar en este sentido... A no ser por la lesión que arrastra desde diciembre.
Otra posibilidad sería el canario Mujica, de 20 años y autor de 5 goles en 19 partidos a las órdenes de García Pimienta en el Barcelona B, pero su candidatura, de entrada, no parece muy tenida en cuenta.
Más aún, el ascenso de un delantero del Barça B en estas circunstancias y pensando en la fase definitiva de la temporada se entiende muy improbable, a la vista del proceder de Valverde y de la exigencia del propio club en la inmediatez de los resultados.