BARCELONA -- El FC Barcelona anunció y presentó oficialmente este jueves a Patrick Kluivert como director de la cantera del club, cargo en el que tomará el puesto que ocupaba hasta el momento Pep Segura, quien debería quedar únicamente con poder en el primer equipo y que se aventura dimitirá en las próximas horas en plena revolución de la política deportiva de la entidad, tres semanas después de que, en primera instancia, el presidente Bartomeu frenase su renuncia.
“Estoy muy feliz de volver a casa y con muchas ganas de iniciar esta nueva etapa en la que afrontamos el reto de seguir haciendo del fútbol del Barça uno de los mejores del mundo” afirmó el holandés en su presentación, privada y en la que le acompañaron los directivos responsables del fútbol formativo azulgrana Xavier Vilajoana y Silvio Elías.
Su contrato se prolongará por dos temporadas, las últimas en la presidencia de un Josep Maria Bartomeu obligado a dar un cambio de rumbo inesperado y que sorprendió con su elección.
Futbolista del Barcelona entre 1998 y 2004, marcando 145 goles en 308 partidos oficiales, Kluivert, de 43 años, se incorpora al club tras su corta experiencia como ayudante de Clarence Seedorf en la selección de Camerún y sin ninguna experiencia desde su retirada en trabajar con el fútbol base más allá de dirigir al equipo juvenil del Ajax antes de ser, durante la temporada 2016-17, director de fútbol del PSG.
El fichaje de Kluivert, además de afectar a Segura, deja en el aire el futuro de José Mari Bakero, que podría quedar solamente como encargado del Barcelona B o, incluso, abandonar el club. Guillermo Amor, quien ejercía en la cantera junto a Bakero, se mantendría como director de Relaciones Institucionales del Barça, al que seguiría representando en los sorteos y siendo portavoz ante las televisiones tras los partidos del primer equipo.
Xavi Roca, ex jugador del fútbol base azulgrana y que ejerció como director deportivo en Chipre, será la mano derecha de Kluivert en la dirección de la cantera, en el gran cambio iniciado a partir de la dimisión del vicepresidente Jordi Mestre en la guerra sorda que se vivió entre los directivos responsables del fútbol.
Durante su mando como director de fútbol del PSG Kluivert avaló los fichajes de Draxler, Guedes, Krychowiak, Lo Celso, Jesé, Meunier y Ben Arfa, una inversión de casi 135 millones de euros y que significó un auténtico fiasco para el club, que fue relegado al segundo lugar final en la Liga, superado por el Mónaco, lo que provocó su despido, siendo sustituido en el cargo por Antero Henrique.