BARCELONA -- Emili Rousaud presentó este jueves su programa y sede electoral en Barcelona, en un pequeño local cercano al Camp Nou en el que repitió su convencimiento acerca del regreso de Neymar al Barcelona, anunció estar trabajando en el fichaje de otro futbolista "franquicia" y advirtió que en la actual situación del club "el salario de Messi es inasumible".
El que fuera vicepresidente en la directiva de Bartomeu hasta su dimisión en abril a raíz del estallido del escándalo Barçagate proclamó que no quiere "aplicar las tijeras porque hay que pensar en grande" y avisó que, contra lo que se quiere pensar, las elecciones "no serán una cosa de dos" en referencia al papel de favoritos con que parten Joan Laporta y Víctor Font.
"Neymar tiene interés en volver al Barcelona”, sostuvo Rousaud, especificando que este retorno "debe ser por una operación sin traspaso, por lo que vendría en 2022, cuando acabe su contrato, y haya retirado todas las demandas que mantiene con el club". Evitando dar el nombre del segundo fichaje estelar en el que trabaja, no negó que pudiera tratarse de Kylian Mbappe, atendiendo a la dificultad actual del Barça en entrar en el mercado de fichajes y estableciendo que el francés también podría desembarcar en el Camp Nou a la finalización de su contrato, cuando acabe la próxima temporada.
"Tenemos que pensar en grande para regenerar ingresos llevando a cabo inversiones que funcionen”, explicó Rousaud, quien mantuvo firme su intención de seguir contando con Lionel Messi en el Barcelona, por más que aviso que "su salario ahora mismo no es asumible".
En este sentido reveló que el argentino nunca quiso dejar el club por una cuestión económica "porque ya es el futbolista mejor pagado del mundo" y se mostró "seguro" de que las consideraciones de Leo "no son económicas, sino de proyecto".
Insistió en su deseo de rebautizar el Camp Nou, acompañándole del nombre de Messi y una marca comercial "potente que, seguro, querrá tener su apellido junto al de Leo" y dio por hecho que el Espai Barça, con la remodelación profunda del Camp Nou como eje principal y más urgente, deberá contar con un aumento del presupuesto "que deberán aprobar los socios".
"No es fácil gestionar desde la austeridad. En tiempos de bonanza todo es más fácil, pero yo sé lo que es construir desde cero”, proclamó Rousaud, que recordó que en su momento quiso formar una candidatura unitaria para "afrontar este momento tan difícil". Su intención no tuvo éxito "por un problema de egos. Hay quien dijo que 'el proyecto soy yo' y se demostró el camino de cada uno... Lo intenté, porque creo que era la mejor forma de afrontar el enorme problema económico que tiene del club. Ahora hay candidatos que hablan de unión pero no quisieron entrar en esta idea transversal. No lo entiendo, estaba dispuesto a no ser el primero”, sentenció.