BARCELONA -- Ladislao Kubala fue en Barcelona "una divinidad", según coinciden en afirmar todos aquellos que le vieron en directo.
Pepe Samitier, acaso la primera leyenda del barcelonismo, era el secretario técnico del club cuando el 15 de junio de 1950, después de un amistoso entre el Espanyol y el Hungaria (equipo formado por exiliados de los países del Este de Europa), cerró el fichaje del futbolista húngaro que, pretendido también por el Real Madrid, cambiaría la historia del Barça y que el 10 de febrero de 1952, se cumplen 69 años, igualó el récord de marcar siete goles en un triunfo 9-0 frente al Sporting, algo que no se ha repetido nunca más.
Es, quizá, el único récord que no podrá lucir Leo Messi en su infinita carrera deportiva en azulgrana. Con los 767 partidos de Xavi a la vuelta de la esquina, los 34 títulos conquistados o los 651 goles anotados, para el crack argentino sería un desafío descomunal poder aspirar a igualar aquel registro de Kubala, el único futbolista que a ojos de los más veteranos aficionados del Barça le puede discutir, si no la consideración de número uno, sí una popularidad a nivel local que tuvo el húngaro en la década de los 50 del pasado siglo.
Kubala jugó 357 partidos y marcó 281 goles como azulgrana, conquistando 14 títulos desde su debut oficial el 29 de abril de 1951, en un partido de Copa frente al Sevilla, y hasta su despedida el 31 de mayo de 1961 con ocasión de la desgraciada final de la Copa de Europa en Berna frente al Benfica. Antes, sin embargo, su leyenda se había iniciado el 12 de octubre de 1950, la tarde en que debutó en un amistoso frente a Osasuna y que dio paso a una serie de partidos amistosos mientras el Barça tramitaba su nacionalización española.
Y fue precisamente el 10 de febrero, el mismo día que en 1929 se estrenó la Liga, cuando el jugador húngaro (que ya sumaba 18 dianas en 17 partidos con el Barça, con un repóker ante el Celta) marcó sus siete goles en 90 minutos. El 8 de febrero de 1931, el lunes se cumplieron 90 años, Bata los marcó... al Barcelona en un 12-1 que es la mayor goleada encajada jamás por el club azulgrana y Kubala se los marcó a Manuel Álvarez Sión, portero del Sporting en un 9-0 que pasó, y permanece, en la historia de la Liga y del futbol mundial.