BARCELONA -- Real Madrid y Barcelona se enfrentarán el sábado en Valdebebas en un Clásico que puede marcar el desenlace de la Liga, con el Atlético de Madrid como tercer protagonista, y a cinco días del partido el ambiente en el futbol español vive ya instalado en la polémica. La victoria del Barça frente al Valladolid no solo fue protestada por el club pucelano, sino que alrededor del Bernabéu llegó a ser considerada "un escándalo" por lo que se entendió un arbitraje muy favorable al club azulgrana.
"Seguro que este árbitro estará el fin de semana en algún partido como premio después de hoy”, publicó en su cuenta de twitter el ex jugador del Real Madrid Roberto Carlos en una reacción que se multiplicó considerando que el Barça tuvo trato de favor por parte de Jaime Latre, no señalando un penalti de Jordi Alba o expulsando a Óscar Plano que incendió las redes sociales.
Si las tertulias periodísticas estuvieron centradas en lo que no pocos periodistas cercanos al club merengue calificaron como "un robo" y un "aviso de lo que le espera al Madrid en el Clásico", ni la clase política quedó al margen de ello, cuando el propio alcalde de Valladolid, Óscar Puente, estalló con ironía afirmando que "yo creo que el árbitro debió entrar al vestuario del Barça a echarles la bronca. Por poco no ganan”, mientras Ronald Koeman, reconociendo haber tenido "suerte" se mostró esperanzado en que toda la polémica que pueda surgir no condicione el arbitraje del próximo sábado: "Hubo momento en la temporada que merecimos decisiones diferentes de los árbitros. No creo que momentos del partido de hoy puedan influir".
Con todo, desde el Barcelona se alertó que durante el partido del lunes existieron otras jugadas a tener en cuenta en la actuación global del árbitro, como fue una agresión a Antoine Griezmann que no fue considerada o un posible penalti a Sergiño Dest que también quedó sin penalización... Todo ello sin olvidar viejas polémicas que durante la temporada favorecieron al Real Madrid.
Ya fuera recordando el Clásico de la primera vuelta o victorias del equipo merengue ante Real Sociedad, Real Betis, Granada o Eibar que no estuvieron exentas de jugadas muy discutibles a favor del equipo de Zidane y que, se afirma desde el entorno azulgrana, no se recuerdan en este momento cuando habrían podido influir, y no poco, en la clasificación.