Manchester City sufrió más de la cuenta en la visita al West Ham y, aunque dominó a su rival, mucho tuvo que ver la tarde errática que vivió Erling Haaland, quien recién pudo convertir a los 86 minutos de juego y con el partido sentenciado, por la quinta fecha de la Premier League.
El equipo de Guardiola ya tiene muy trabajada la paciencia y el conjunto de David Moyes le propuso un encuentro difícil de abrir, donde le cedió la pelota y todo el protagonismo y se dispuso a esperarlo y contragolpear. El City fue el de siempre. Generó varias situaciones claras y, sin embargo, se fue 0-1 en el primer tiempo. ¿Por qué? Dos nombres clave: Alphonse Areola, el arquero hammer fue una verdadera muralla, y Haaland, el goleador noruego llegó con la pólvora mojada al estadio Olímpico de Londres.
A los cinco minutos de juego Manchester podría haber estado en ventaja: tuvo seis disparos en una misma jugada. Tres veces salvó el guardameta, una de ellas al Androide, quien dos veces más se perdió el gol, solo debajo del arco. Difícil de creer tratándose de él.
A su servicio estuvieron Jeremy Doku y Phil Foden por las bandas, Julián Álvarez, como un media punta, Bernardo Silva y Rodri, generando el juego interno, respaldados por las subidas de Kyle Walker y Josko Gvardiol.
Areola protagonizó otros dos mano a mano muy claro frente a Haaland en el segundo tiempo, donde de nuevo, el noruego terminó frustrado.
La estadística dice que el delantero pateó nueve veces al arco, de las cuales, le desviaron seis, pero una, sí, una, llegó al fondo de la red. Y eso es lo que hay que rescatarle en este partido a Haaland. No simplemente que anotó, si no, que nunca dejó de buscar.
Hizo el 3-1, cuando ya todo parecía definido a favor del City por los tantos de Jeremy Doku y Bernardo Silva, asistidos por Julián Álvarez. James Ward Prowse le había dado la ventaja inicial al West Ham, a los 36 minutos.
Quinta victoria en fila para Manchester City en cinco jornadas. Puntaje ideal y liderazgo asegurado por otra semana, a días de su debut en la UEFA Champions League frente al Estrella Roja de Belgrado.
Y Erling Haaland llegará afilado, con siete tantos en cinco presencias, aún cuando no siempre parece estar en un buen día.