Matthijs de Ligt fue uno de los futbolistas más buscados del mercado de verano, con ofertas del FC Barcelona y París Saint-Germain, entre otros clubes; sin embargo, se decantó por la Juventus, en donde empezó el torneo en la banca.
El defensa holandés le costó 85.5 millones de euros a la Juventus, pero en la primera jornada de la Serie A, ante el Parma, no recibió minutos de juego.
En declaraciones al medio holandés ‘AD’, De Ligt reconoció que “naturalmente hubiera preferido jugar y no recibí ninguna señal durante los entrenamientos, así que no esperaba estar en el banquillo”. El holandés dijo sentirse sorprendido, pero se mostró respetuoso con su entrenador, Maurizio Sarri.
“Respeto la decisión del entrenador. Debo ser realista, aún me estoy adaptando aquí, en Italia. Los defensas que jugaron, Bonucci y Chiellini, han sido considerados por mucho tiempo la mejor pareja de centrales del mundo.
“Tengo que ganarme un puesto esta temporada. Las cinco primeras semanas han sido duras a nivel físico, pero noto que estoy haciéndome más fuerte”, consideró.
Finalmente, De Ligt valoró que la marca en el Calcio es muy distinta a la Eredivisie y se está adaptando a las exigencias de su entrenador.
“Las exigencias defensivas no son demasiado diferentes a lo que acostumbraba en el Ajax, ya que el entrenador quiere que anticipemos los movimientos”.