Al América, Rayados y Tigres los avala su posición en la tabla para aparecer como favoritos en la próxima Liguilla, mientras esperan a que pase el nuevo invento llamado play-in.
LOS ÁNGELES -- Subieron ya a esta versión futbolera y mexicana del Arca de Noé, para ponerse a salvo del diluvio de la podredumbre de este Apertura 2023. Claro, entre los 10, hay intrusos, polizones, advenedizos, que antes deberán pasar el filtro farsante del play-in, una fase de misericordia con los inmisericordes del futbol.
Diecisiete jornadas y hasta tres de los hijos bastardos de la Multipropiedad, filtraron al menos a uno por grupo, y en condiciones lastimeras del chiripazo y arrastrándose: Santos (Orlegi), León (Pachuca), Mazatlán y Puebla (Azteca), excepto claro, el Grupo Caliente, con sus parodias de clubes segregados: Xolos y Querétaro.
Se cocina aparte el América con sus 40 puntos, pero con dudas por su pichicata postura en el partido final ante Tigres. No se puede ostentar la grandeza del águila, con tan ratonera propuesta. Monterrey y los mismos Tigres, son sus cortesanas en la Tabla de Posiciones.
Debajo de estos tres, mediocridad que supura: Pumas le esquilma el cuarto lugar a Chivas, cortesía de la estulticia de Veljko Paunovic y una sospechosísima postura de Alexis Vega al fallar el penalti, quien se vio menos compungido que en una resaca posterior a sus prolongadas noches caligulescamente tercermundistas. Ambos apenas por encima del 50 por ciento de productividad. Le sigue Puebla, que, entre el TAS y un ataque de tardía dignidad, clasifica directo.
Y enseguida, los paridos por la clandestinidad, a jugar un repechaje farsante, con el pomposo y plagiado nombre de play-in, cortesía de las atrofiadas entendederas de Mikel Arriola, en sus últimos escarceos al frente de la Liga Mx.
Ahí, en ese coliseo de menesterosos, de purulentos, se regodea la miseria de la Multipropiedad: Santos contra Mazatlán, y León, al que apenas le alcanza para visitar al San Luis, también hijo espurio de una Multipropiedad de importación, con la paternidad irresponsable del Atlético de Madrid.
América sigue siendo favorito, no obstante haberse asustado con la zalea del Tigre, también hecho más zalea que fiera, en un pacto de no agresión, y en el que ambos equipos apadrinaron casi tácitamente un pacto de no agresión, para dejar en claro que la rivalidad entre ambos equipos no es un sentimiento genuino sino una circunstancia mediática.
En El Nido, les aterra la Fecha FIFA, con al menos seis jugadores cedidos a diferentes selecciones, mientras que Tigres envía apenas a dos suplentes al Tri: Sebastián Córdova y Jesús Ángulo. La doble encerrona con Honduras supura, como siempre, rudeza y dureza.
Inevitablemente del cinco al diez en la Tabla de Posiciones, se agazapan equipos que son como los muñequitos de la Rosca de Reyes, escondidos, amargos, repudiados, pero, además una sorpresa indeseable. Ahí todos, desde unas Chivas cuyo técnico ha ofrecido más disculpas que festejos, pasando por Puebla y los cuatro segregados del play-in.
Las expectativas y la expectación colocan sus candilejas en América, Rayados y Tigres, quienes tendrán su mejor plantel posible para el arranque de la Liguilla, y con cautela pero sin temores extremos a sus escoltas.
Recuérdese que en estos tres equipos, ningún jugador de los otros cinco que eventualmente jueguen la Liguilla, les despertaría el apetito, a no ser tal vez, El Chino Huerta, El Piojo Alvarado, Memo Martínez, Harold Preciado y Juan Brunetta. Del resto, si desaparecieran de la Liga Mx, nadie elevaría un responso por ellos. Nadie pasaría lista de presente.
Así, por lo pronto, en espera de este plagio de formato del play-in, de un deporte que alguna vez llamó el legendario Ángel Fernández como “el juego del hombre”, ahora, de manera hollywoodense, resiste perfectamente, aquello de los Juegos del Hambre, entre cuatro que futbolísticamente, mueren de inanición.