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Los fantasmas que Cruz Azul venció en la final ante Santos

Después de 23 años, La Máquina consiguió la ansiada novena venciendo a todos sus fantasmas.

Cruz Azul venció a los fantasmas que habían crecido en los últimos 23 años. La Máquina se sobrepuso a varios panoramas que los han atormentado desde 1997. A pesar del empate de Santos, reaccionaron, vieron a Carlos Acevedo en su área cerca de rematar, tal como lo hizo Moisés Muñoz en el Clausura 2013, alejaron sus miedos y las 'Cruzazuleadas' de los últimos minutos para lograr la ansiada novena estrella.

En ESPN te presentamos los fantasmas que venció el Cruz Azul para este campeonato.

Le empataron el marcador y se sobrepuso

Apenas a los 37 minutos de juego los fantasmas comenzaron a aparecer en la cancha del Estadio Azteca. Diego Valdés tomó el esférico en los lineros del área celeste, amagó en un par de ocasiones ante la marca de Julio César Domínguez y Juan Escobar hasta encontrar un hueco para sacar un potente disparo de izquierda que se coló por el ángulo de la portería de Jesús Corona para poner el 1-1 en el marcador global.

En finales anteriores, tras verse superados o igualados en el marcador, Cruz Azul se quedaba sin reacción. Sin embargo, la respuesta vino desde el banquillo. Juan Reynoso realizó dos cambios que le funcionaron cinco minutos después. Mandó a Yoshimar Yotún y Santiago Giménez al terreno de juego por Roberto Alvarado y Orbelín Pineda. El peruano fue el encargado de asistir a Jonathan Rodriguez al minuto 50, para hacer el gol del campeonato y a dejar todos los fantasmas y miedos que envolvieron al entorno celeste por 23 años.

Tiro de esquina con portero rival en el área en tiempo agregado

Santos, con el 2-1 en contra, tuvo un tiro de esquina y Carlos Acevedo apareció en el área celeste. Dicha escena, duró solo unos segundos, pero hizo recordar a la jugada que Moisés Muñoz capitalizó en la final del Clausura 2013 para firmar una ’Cruzazuleada’ y mandar el partido a tiempos extra, duelo en el que América se coronó tras la tanda de penales.

Ocho años después, se volvió a repetir. Santos ejecutó el tiro de esquina, justo el balón iba con dirección a Carlos Acevedo, en aquella ocasión el balón fue rematado por Moisés Muñoz, pero en esta ocasión Jesús Corona salió por el esférico y la cabeza del portero Guerrero se estrelló en el antebrazo del cancerbero cementero.

Los últimos minutos no fueron trágicos

Las ‘Cruzazuleadas’ se escriben, normalmente, en los últimos minutos, ya cuando parece que todo está a favor de la Máquina. El domingo por la noche se presentó ese panorama, pero no jugó en contra de los cementeros.

Cruz Azul supo encarar con personalidad los últimos minutos, a pesar de que Fernando Hernández agregó cinco minutos. Los celestes sufrieron, pero se coronaron. Vivieron con nerviosismo el último tiro de esquina, lo soltaron un poco en la bronca que presidió la última jugada del cotejo y explotaron con el silbatazo final.


Santos, un viejo conocido en finales

La Máquina se enfrentó a Santos, rival que les había ganado el campeonato del Clausura 2008, en el segundo intento fallido para alzar la novena. En aquella ocasión, los Guerreros se impusieron 3-2. La revancha llegó 13 años más tarde y se tiñó de celeste con marcador global de 2-1.

Se coronaron en el Estadio Azteca

Luego del campeonato del Invierno 1997, Cruz Azul perdió dos finales, de las seis que había disputado en el Estadio Azteca, ambas contra el América. En el Clausura 2013 se firmó una de las mayores ‘Cruzazuleadas’ y en el Apertura 2018 quedaron sin reacción ante los dos goles de Edson Álvarez.

Corona y Domínguez finalmente pudieron ser campeones

Son los jugadores más longevos en la plantilla de Cruz Azul. Julio César Domínguez debutó con la Máquina en el 2006 y había perdido cinco finales vestido de celeste. Por otro lado, Jesús Corona llegó a los cementeros para el Apertura 2009, momento en el que ya sumaba un subcampeonato con Tecos, pero con los de la Noria suma tres caídas en duelos por el campeonato.