"Realmente me fastidiará no ir a la Copa del Mundo, pero mis valores son lo primero", dijo la defensa de Barcelona y de España, Mapi León, en marzo.
Esta semana fue una de las grandes ausentes, junto a su compañera de club Patri Guijarro, de la plantilla provisional de 30 jugadoras anunciada por el técnico Jorge Vilda para el Mundial femenino de este verano en Australia y Nueva Zelanda. La lista se reducirá a 23 el 30 de junio.
León y Guijarro estaban entre las 15 jugadoras que escribieron simultáneamente a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en septiembre de 2022, diciendo que las condiciones dentro del equipo nacional habían afectado su salud y estado mental. Hasta que no viesen cambios y mejoras, no querían ser convocadas.
Los jugadores siempre han sostenido que querían que sus quejas se trataran en privado, no en público en la prensa.
"Es un tema que se debe manejar y resolver internamente porque lo que ha pasado este año no ha sido agradable para nadie", dijo la centrocampista del Barcelona Aitana Bonmatí, una de los 15, a ESPN recientemente. "Los únicos que saben exactamente lo que está pasando son [las jugadoras] y la RFEF".
Sin embargo, la RFEF no siempre ha estado en la misma página. Su respuesta inicial en septiembre fue calificar el motín como "sin precedentes" y prometer "no permitir que los jugadores cuestionen la continuidad del entrenador".
Fuentes consultadas por ESPN en su momento dijeron que no se trataba necesariamente de que Vilda, quien ha sido entrenador desde 2015, se mantuviera en su cargo, sino de si se mejoraba y profesionalizaba todo el montaje en torno a la selección.
La situación se prolongó hasta este año cuando, en los últimos meses, con el Mundial a la vista, las jugadoras se vieron obligadas a replantearse sus posiciones y sus prioridades.
El lunes, Vilda nombró a tres de las 15 en su plantel provisional para el Mundial. Bonmatí, recientemente nombrada Jugadora de la Temporada de la UEFA Women's Champions League, su compañera del Barça, Mariona Caldentey, y la lateral del Manchester United, Ona Batlle, regresaron al redil.
Otras cinco jugadoras, dijeron las fuentes a ESPN, también se declararon disponibles para la selección, incluida la portera del Barça, Sandra Paños. Sin embargo, Vilda, envalentonado por una racha de una derrota en nueve juegos sin las 15, incluida una primera victoria sobre Estados Unidos, además de un sentido de lealtad hacia as que han entrado en el equipo, no las eligió.
"Es especialmente difícil entender por qué no ha sido seleccionado [Paños]", dijo una fuente, señalando que cuatro porteras han sido nombradas en el equipo provisional, incluida la suplente de Paños a nivel de club, Catalina Coll.
Hubo varios factores detrás de que esas ocho jugadoras estuvieran disponibles para la selección nacional en la Copa del Mundo. Las fuentes dicen que la RFEF ha promulgado cambios desde septiembre de 2022. Los viajes a los campamentos y partidos han mejorado significativamente, la calidad de oponentes en los amistosos ha aumentado y se ha designado nuevo personal para ayudar con el trabajo físico y la prevención y rehabilitación de lesiones. También se dice que las jugadoras tienen más libertad durante las reuniones, mientras que antes sentían que se ejercía demasiado control sobre ellas.
Para siete jugadoras, eso no se consideró suficiente. León, nombrada en el FIFPro World XI esta temporada y una incondicional del Barça que ha ganado dos de las últimas tres Champions League, antepuso sus "valores" a su sueño de ganar una Copa del Mundo. La mediocampista Guijarro, quien marcó dos goles en la victoria del Barça en la final de la Liga de Campeones sobre el VfL Wolfsburgo este mes, hizo lo mismo.
Más allá de los cambios, suficientes o no, llevados a cabo por la RFEF, las jugadoras (algunas más que otras) también sufrieron una enorme presión externa para estar disponibles para el Mundial. Los agentes, patrocinadores y marcas quieren ver a las jugadoras con los que están asociados actuando en el escenario más grande del juego. Bonmatí, quinta en la votación del Balón de Oro este año, se perfila como posible ganadora el próximo año. Un papel protagónico en la Copa del Mundo, luego de un doblete de la Liga F y la Liga de Campeones con su club, respaldaría su caso.
Financieramente, el nuevo modelo de pago de la FIFA garantiza a cada jugadora que juega en la fase de grupos 30,000 dólares, aumentando a 270,000 dólares potenciales para las del equipo ganador. Lejos de los cientos de millones que se arrojan en el juego masculino, esa es una gran cantidad de dinero.
España también contará con la ganadora del Balón de Oro en años consecutivos, Alexia Putellas, en la Copa del Mundo. La centrocampista azulgrana se perdió la Eurocopa del pasado verano, cuando La Roja fue eliminada por el eventual campeón Inglaterra, por una lesión en el ligamento cruzado anterior. También se perdió la mayor parte de esta temporada, regresando para los últimos seis juegos, lo que significa que, a pesar de compartir su declaración y apoyar su causa, nunca formó parte oficialmente de las 15. Nunca dejó de estar disponible para la selección y, por lo tanto, nunca tuvo que volver a estar disponible. Después de un año de dolor por lesiones, la Copa del Mundo es el escenario perfecto para marcar su regreso a la forma física.
También viajará a Nueva Zelanda, donde España tiene su sede para la fase de grupos, Irene Paredes. La defensa azulgrana dio la rueda de prensa inicial para expresar el descontento de las jugadoras con las condiciones en la selección el año pasado. Sin embargo, no formó parte de las 15 y regresó al equipo en abril.
La delantera del Pachuca y goleadora histórica de España, Jennifer Hermoso, también regresó en febrero y fue incluida en la lista provisional de 30 jugadoras. Al igual que Paredes, apoyó la declaración de las 15, pero no se unió a ellas oficialmente.
Crea un telón de fondo complicado para la campaña de España en la Copa del Mundo. Si bien Vilda dice que la situación ahora está "prácticamente resuelta, salvo algunos detalles" luego de una serie de reuniones en los últimos nueve meses, el hecho de que siete jugadores todavía no sientan que pueden regresar pinta una imagen diferente. También hay decepción y sorpresa por cómo ha tratado a algunas de las otras jugadoras que estaban dispuestas a volver, como Paños.
Sin embargo, las fuentes insisten en que no hay fricción entre ninguna de los jugadoras, independientemente de las decisiones contrastantes que hayan tomado con la Copa del Mundo en mente.
Hace que sea difícil predecir las posibilidades de España en la fase final, donde se enfrentará a Costa Rica, Zambia y Japón en la fase de grupos. Por un lado, se beneficia enormemente del regreso de Putellas y Bonmatí, dos de las cinco mejores jugadoras del mundo, según el ranking del Balón de Oro, mientras que también ha tenido un desempeño impresionante sin ellas. Por otro lado, los acontecimientos de los últimos nueve meses dejan una nube negra sobre el equipo, por mucho que Vilda proteste por lo contrario.
“Algunas [de las 15] están aquí y estoy convencido de que trabajarán para ser parte del grupo y que lucharán por lo más grande que hay en el deporte, que es representar a tu país”, dijo Vilda, “pero no voy a hablar de las que no están aquí. Las 30 que están aquí son deportistas. Quieren hacer un grupo fuerte, quieren a los mejores jugadores junto a ellos. El deporte te une. Estoy convencido de que habrá concordia y tranquilidad, son jugadoras profesionales.
"Desde septiembre han sucedido bastantes cosas. … Le ganamos a EE. UU. por primera vez, llegamos al sexto lugar en el ranking mundial y queremos escalar más alto, lo cual estoy convencido de que podemos conseguir con estas jugadoras. Es absurdo pensar en lo que está detrás de nosotros cuando lo que está delante es tan, tan importante. No vamos a gastar nuestra energía en eso".