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Berizzo, por posibles reemplazos de Pulgar, Maripán y Catalán: "Vamos a privilegiar el juego aéreo"

El técnico de la Selección Chilena manifestó sus intenciones de encontrar sustitutos que garanticen juego aéreo. Photosport

Eduardo Berizzo hizo una declaración de intenciones en lo que ha sido una de sus prioridades a cargo del presente proceso que encabeza con Chile camino al Mundial de 2026: la pelota parada.

En esa vía, el DT de la Roja afirmó que ante las ausencias obligadas por lesión de Guillermo Maripán y Matías Catalán, sumados a la suspensión de Erick Pulgar, intentarán suplir esos puestos con piezas de similares características.

"Buscaremos reemplazos que garanticen el juego aéreo como primera medida. Luego nos interesa el orden defensivo, porque hemos perdido tres futbolistas en esas áreas: lateral derecho (Catalán), central (Maripán) y contención (Pulgar) que queremos resolverlo", señaló el extécnico de Paraguay, Sevilla y Celta de Vigo, entre otros.

Al mismo tiempo, Berizzo recalcó que su idea pasa por no perder la fisionomía de equipo y nombró distintas alternativas que maneja, aunque nada concreto hasta ahora, ya que dependerá de la evaluación que haga en las subsiguientes prácticas en territorio venezolano.

Sin aire acondicionado como parte de la estrategia

Por otro lado, una vez consultado por el clima en Maturín, el "Toto" reconoció las inclemencias del tiempo, con temperaturas poco acostumbradas para los seleccionados nacionales: "Es evidente el calor que hace", expresó.

Por tal razón, el DT argentino no dejó escapar ningún detalle e incluso hizo que los jugadores durmieran y descansaran sin aire acondicionado en el hotel: "Tienen que empezar a sentir el impacto de la temperatura, y no minimizarla".

Con esta premisa, el estratega dijo que pretende que los futbolistas se vayan aclimatando a lo que será el partido en pleno campo de juego, donde se anticipa una alta sensación térmica que oscilará entre los 23 y 36 grados, lo que es un día normal en la ciudad que alberga el Estadio Monumental de Maturín, donde suele hacer de local el Monagas.

"Quiero que absorban la incomodidad del calor", afirmó con algo de humor, pero tomando muy en serio la medida que considera pertinente para la adaptación de los futbolistas a dicha exigencia.