Con un cierre de año espectacular, tres victorias consecutivas incluidos Brasil y Argentina de forma consecutiva, Uruguay terminó el 2023 segundo en las Eliminatorias.
En Buenos Aires, con un planteo táctico impecable, una intensidad fenomenal y actuaciones que rayaron a gran altura, el equipo de Marcelo Bielsa superó con claridad meridiana al campeón del mundo en La Bombonera y le quitó el invicto que traía desde la primera fecha del mundial y que extendía en las Eliminatorias.
Desde que comenzó el partido se notó la incomodidad del local. Fue cortado el circuito del mediocampo argentino y comenzaron a aparecer las grandes figuras de Uruguay. Ugarte se comió la cancha y lejos de meterse atrás, Uruguay salió a buscar el partido. Messi no podía recibir con comodidad y se notó el malestar de algunos jugadores de la albiceleste.
Un partido redondo de un equipo que jugó a un nivel extraordinario. A nadie podría haber extrañado que el primer tiempo terminara con un marcador mayor. Fue Uruguay el que tuvo tres situaciones claras de gol.
Una gran victoria que hay gente que lo quiere comparar con la era del maestro Tabárez queriendo desconocer lo hecho por el anterior entrenador.
El propio Bielsa manifestó que era imposible no reconocer el gran trabajo del anterior entrenador: “Este grupo y los jóvenes se habían visto reflejados en el grupo anterior y eso había sido obra de Tabárez”, dijo.
Tampoco podemos dejar de reconocer que los procesos de selecciones juveniles tuvieron mucho que ver con este presente al que el técnico argentino colocó su impronta que ha hecho que el equipo salga a ser protagonista desde el primer minuto.
Hace unos días, en un homenaje que le realizaron al Maestro, dijo que nunca había visto a la selección jugar como lo hizo ante Argentina en Buenos Aires. Lo peor que podemos hacer los uruguayos, tan proclives al blanco o negro, sin pasar por los grises, como decía mi amigo Yanuzzi, es desacreditar a uno y endiosar a otro. Indudablemente lo de Bielsa es muy bueno. Y lo ha hecho sin tiempo de trabajo en cancha pero reconozcamos que la base está en el proceso de Tabárez, como el propio Bielsa manifestó.
Esto es como desconocer que todos estos jugadores, todos ellos, fueron formados por otros entrenadores en divisiones formativas de los clubes uruguayos y eso también tiene su qué ver. No nos quedemos en la chiquita.
Vamos a tener un fin de año feliz, futbolísticamente hablando y en la medida que todos tiremos para el mismo lado podemos esperar cosas mejores. Porque siempre lo mejor está por venir.