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Scaloni no dudó: ¿se puede reemplazar a Di María?

Di María, uno de los nombres fundamentales de la era Scaloni. Shaun Botterill / Getty Images

Lionel Scaloni, entrenador de la Selección Argentina, fue contundente sobre la posibilidad de reemplazar a Ángel Di María, quien se retiró de la Albiceleste con la conquista de la Copa América.

En diálogo con Clank!, el DT campeón del mundo no dudó a la hora de hablar del post Di María y Lionel Messi: "Es irremplazable, no son jugadores que se puedan reemplazar, imposible. No hay ni una chance, son jugadores únicos tanto Fideo como Leo".

"En el caso de Fideo, que ya no va a venir más y lo ha dicho, no intentaremos buscar un reemplazante, porque sería un error buscar un jugador que haga lo mismo que él, no existe. Sí es verdad que lo que él nos daba era amplitud, tanto por la derecha como por izquierda, bastante más ha jugado con nosotros por derecha. Intentaremos buscar a un jugador que pueda, y que creo que lo tenemos en el equipo, aportar esa amplitud", añadió el nacido en Pujato.

Y concluyó: "Pero después el uno contra uno, el entender la jugada, el sacarse de la galera jugadas increíbles, solo lo tenía él, así que el equipo tendrá que, no digo resetearse, pero sí intentar jugar de otra manera sin él".

El día en el que Scaloni lloró con Di María

En otro orden, Scaloni se refirió al momento en el que llamó a Di María después de que este dijera publicamente, en una entrevista, que quería ser convocado a la Selección: "Aparte de conocerlo, sé que se moría de ganar de estar en la Selección, y lo ha demostrado. Pero en ese momento nosotros estábamos muy pendientes de darle la posibilidad de jugar a Nico González, que creíamos que nos podía dar un montón, y traerlo con Ángel... creíamos que no le podíamos dar los minutos que necesitaba. Y yo lo llamé después de esa charla que tuvo en la televisión, creo que a los pocos segundos, y nos largamos a llorar juntos. Él lloraba con que quería estar, y yo lloraba con él, y le decía que iba a estar, que nadie le había dicho que no iba a estar, pero el problema era que ahí no necesitaba que estuviera, necesitaba que no estuviera, para darles la posibilidad a Nico González, a Lucas Ocampos, jugadores que a la sombra de Di María quizás no hubieran dado lo que podía dar".

"Y bajo ningún concepto la idea era no traerlo más, él iba a estar seguro, pero a lo mejor para él, si vamos a hilar fino, de su lado podía estar igual, si es un chico entrañable y para todos hubiera sido mejor, pero para el jugador que juega en su posición o lo reemplaza, es muy bravo. Pero el jugador es difícil que lo entienda, el jugador quiere estar. Por suerte él lo entendió, aunque lógicamente en ese momento era duro, pero creo que para el grupo y la Selección fue positivo todo lo que se dio, porque esos chicos dieron ese paso que nosotros necesitábamos", cerró.

Cuándo decidió poner a Di María por izquierda en la final

Finalmente, el exdefensor fue consultado por el momento en el que tomó la decisión de cambiar de banda al Fideo previo a la final del Mundial de Qatar 2022, frente a Francia, una de las claves para el gran partido de la Albiceleste. "Es un poco extraño, porque yo al cuerpo técnico no se lo dije hasta el día del partido, al mediodía".

"Yo lo tenía en la cabeza cuando hablábamos de cómo atacar, y yo tenía clarísimo que nosotros teníamos que atacar por ese lado. Y caminando por la universidad con todo el cuerpo técnico les digo 'vamos a jugar con Ángel a la izquierda, y atrás Tagliafico'. Como siempre, ninguno me da la contra, porque cuando me ven así seguro... Y Pablo me dice 'me gusta, me gusta, loco, me gusta'. Y yo necesitaba solo ese empujoncito", continuó.

Y argumentó: "Pero en la semana, después de ver y analizar a Francia, sentía que muchas cosas iban cerrando. Pero con Alexis en la entrelínea iba a preocupar a Koundé, y Dembelé no iba a bajar para seguir a Fideo, y si atacaban Dembelé, Tagliafico estaba bien para contenerlo. Fue una decisión bastante pensada, pero que no se la dijimos ni a los jugadores, ni yo al cuerpo técnico un par de horas antes de dar la charla, porque yo necesitaba convencerme a mí mismo, y después que no hubiera dudas, porque no era un momento para tener dudas. Se dieron cuenta de que yo estaba convencido".