La Selección Colombia comenzó invicta esta segunda etapa de Reinaldo Rueda. Escaló al quinto puesto de las Eliminatorias al Mundial 2022, recuperó puntos, aunque no confiabilidad futbolística. Tendrá más tiempo de trabajo en la Copa América.
El equipo se reconcilió con los números. Hizo cuatro puntos de seis, mejoró su diferencia de gol (pasó a menos dos) y volvió a la pelea por la clasificación, ahora desde el quinto lugar.
Con ese balance a favor, el técnico podrá desarrollar con más crédito su proyecto de juego que necesita más horas de trabajo para evitar correcciones apuradas en medio de los partidos. Le pasó contra Argentina con el cambio de Luis Fernando Muriel por Jefferson Lerma a los 30 minutos. Corrigió y salvó el empate, pero la sostenibilidad de su mensaje de posesión y solidaridad está muy débil.
La defensa a examen profundo
Los equipos del DT suelen tener defensas fuertes. Su Nacional campeón de Libertadores recibió seis goles en los 14 partidos de la temporada en la que se cruzó con brasileños y argentinos en fases decisivas. Además tenía laterales de salida con Daniel Bocanegra y Farid Díaz.
La Selección sacó el arco en cero frente a Perú, pero contra los argentinos la seguridad se hizo trizas en apenas ocho minutos. Perdió en el juego aéreo con centrales de talla que además acompañaron con la mirada la técnica individual de Leandro Paredes en el segundo gol.
Superada por el arranque furioso del visitante, Colombia se enredó para cubrir espacios, fue aparatosa para despejar y se mantuvo en pie por el trabajo de David Ospina. Los laterales estuvieron un punto más arriba, por sus duelos parejos con Rodrigo de Paul y Nicolás González. Stefan Medina aprobó como lateral derecho por la sociedad con Juan Guillermo Cuadrado, mientras que William Tesillo empujó hasta donde pudo improvisado por la izquierda.
El DT tiene a la mano la experiencia de Oscar Murillo y la juventud de la dupla del Genk Daniel Muñoz y Carlos Cuesta. Puede probar nuevas fórmulas durante la Copa América.
Posesión y solidaridad con los nombres correctos
Reinaldo pretende un equipo con solidaridad colectiva y de posesión de balón. Modificó el 4-4-2 de Lima por un 4-3-3 con más marca pues sacó a Luis Fernando Muriel por Jefferson Lerma. Aunque ganó en presencia física, equivocó su intención de dominar la pelota. El mediocampista del Bournemouth no pudo cumplir con esas dos funciones y apenas jugó media hora. El atacante del Atalanta respondió mejor cuando se ubicó como media punta y Colombia se acercó más a esa idea inicial.
Muriel debe jugar
Alejado del costado izquierdo y más como media punta, Luis Fernando Muriel simplificó cosas en ataque. Juan Guillermo Cuadrado encontró más respaldo para combinar por el interior del campo, ordenó más a sus compañeros e intentó activar a un opaco Duván Zapata. Terminó sacrificado en el plan del 4-3-3 pero el entrenador ajustó a tiempo y fue uno de los mejores en el empate en Barranquilla.
"Es un jugador que tiene esa sensibilidad especial de saber desenvolverse en espacio corto. Por su excelente técnica, aparte de su capacidad goleadora y el marcador adverso, era buscar el acompañamiento para Duván y generar más volumen ofensivo. Pienso que fue importante anímicamente para el equipo. El ingreso de Muriel brindó esa posibilidad de reacción y de buscar el arco rival", reconoció Rueda.
El grupo está unido
Los reclamos de Cuadrado devolvieron a Colombia al partido. Sirvieron como el golpe de timón necesario para generar la reacción ante el segundo de la Eliminatoria. A pura convicción disimuló la ausencia de la técnica y categoría de James para resolver problemas con fútbol.
Lo que viene
El DT reconoció que el equipo está en construcción. La tabla de tranquilidad para mejorar. Debe ser una Selección más confiable.
"Seguro que sigue ratificándose lo complejo que es esta clasificatoria sudamericana por la calidad de todas las selecciones. Esto se define en el último día, en el último minuto del último partido y hay que ir hasta la última jornada con esa fe. Debemos ser conscientes de que estamos en deuda, que estamos remando contra la corriente por la posición en la tabla, pero con la ilusión de seguir mejorando. Debemos hacer un mejor juego y lograr mejores resultados que nos permitan la posibilidad de descontar en la tabla y poder ubicarnos donde queremos", concluyó Rueda.