Doha será el centro neurálgico de la Copa del Mundo 2022. La capital qatarí es la ciudad más antigua, más poblada y más grande del país. Allí se vivirá el torneo en todo su esplendor, ya que la gran mayoría de los hoteles y de las atracciones turística están ubicados en las inmediaciones de esta urbe ubicada en la costa del golfo Pérsico.
Fue fundada en 1825 bajo el nombre de Al-Bida y es capital de la nación desde 1916, cuando comenzó el protectorado británico que se extendió hasta la independencia de 1971. Su crecimiento fue vertiginoso en este siglo, ya que pasó de tener poco más de 600.000 habitantes en 2004 hasta los casi dos millones de la actualidad. Su desarrollo es uno de los más rápidos del planeta.
En Doha viven dos tercios de los qataríes. Es el centro económico del país. Allí se encuentran las sedes de las principales corporaciones, la mayoría dedicadas al petróleo y a la energía. Además, es el corazón del fútbol nacional. El primer club de la península fue el Al Ahli SC, fundado en 1950 con el nombre de Al Najah SC.
Doha está conectada por aire con el resto del mundo y por tierra con todas las otras sub-sedes de la Copa. Además, tiene un novedoso sistema de metro remodelado especialmente para el evento. Moverse por dentro y fuera de la ciudad no será un problema durante el campeonato.
La playa será uno de los grandes atractivos para los hinchas. Según informa la FIFA en su web, "el Al Ghariya Resort, en el paseo marítimo, repleto de zonas peatonales, como la Corniche de Doha, es un paseo imperdible. Un malecón que se extiende a lo largo de varios kilómetros bañado por la bahía de Doha".
Tres de los ocho estadios están situados en la ciudad. El más importante es el Internacional Khalifa, hogar histórico de la Selección y escenario principal del país desde su inauguración en 1976. Los otros son el Ras Abu Aboud, que tras el Mundial será desmontado, y el Al Thumama.