“¿Si me falló Ruglio? Yo no sé si esa es la palabra, yo siempre lo escuché decir que no echaba entrenadores y eso fue lo que más me dolió”. Leonardo Ramos no ocultó el dolor que le generó su salida de Peñarol y expresó que se sorprendió con el presidente porque lo había escuchado decir que no echaba entrenadores y ya estaba armando el plantel para el año 2023.
El exentrenador de Peñarol habló en el programa 100% Deportes de Sport 890 donde hizo mención a la salida de Gargano, qué pasó con Billy Arce y Lozano, su relación con Bengoechea y su decepción con la directiva.
“Ya pasé el momento más complicado de esto que pasó. Uno no espera ni visualiza que eso suceda, pero cuando empezaron los rumores luego del partido con La Luz creía que podía llegar ese momento. Sinceramente no lo esperaba. Había firmado contrato por un año y medio y lo primero que se me dijo fue que terminaría junto con el mandato del presidente. Por eso me llamó la atención que, a los tres meses, cuando el presidente decía que no echaba entrenadores, tomó la decisión de no contar más con nosotros”, comenzó diciendo el técnico.
Ramos agregó que llevaba un mes buscando jugadores de cara a la temporada 2023. “Iniciamos conversaciones con la comisión de fútbol y de un momento a otro se cortó todo y eso fue lo que más me hizo daño. No lo esperaba. Entiendo que el resultado con La Luz fue catastrófico, pero como siempre escuché decir que nunca echaban al entrenador, no digo que estaba tranquilo, pero estaba pensando en el año que viene. Solo él (Ruglio) sabrá si lo que hizo fue cortar por el hilo más fino”.
LA SALIDA DE GARGANO
A la hora de hablar de la salida del equipo del capitán Walter Gargano, Leo Ramos expresó: “Cuando sacamos al Mota, que se habló mucho de que había sido un mensaje de la directiva, en realidad nunca me dijeron nada. ¿Por qué lo saqué? Salieron otros (futbolistas) que tampoco jugaron más porque tomamos la decisión de tener en cuenta a otros jugadores. Son decisiones de un entrenador. Para mí el Mota sigue siendo un gran jugador. Yo personalmente no lo veía bien. Es una decisión muy pensada, corriendo riesgo de quedarme sin experiencia en el medio”.
Consultado sobre si había sacado a Gargano por intercambiar la camiseta con Luis Suárez en el clásico, el DT respondió: “No porque lo hablé, lo hablé porque esa misma pregunta me la hizo él y le dije: Mota, me extraña que me preguntes esto conociéndome, fue simplemente un tema futbolístico”.
¿QUÉ PASÓ CON LOZANO Y BILLY ARCE?
Posteriormente Ramos hizo referencia a la salida de Brian Lozano explicando: “Se dijo que Lozano no estaba de acuerdo con nosotros y que se iba por alguna situación que había vivido y la realidad es opuesta, lo pueden llamar a él. Él no estaba cómodo en el club por cuestiones que él las dirá en su momento”.
Cuando se le dijo que Lozano había declarado que le pidió que lo sacara, Ramos respondió: “De la conversación que tuvimos nosotros con él no va a salir nada de mi boca. Sé algunas situaciones que estaba pasando y nos pusimos a su disposición en todo momento y creíamos que lo mejor era reservarlo y ponerlo en los últimos minutos de los partidos. Si él comentó eso, bueno, fue una de las partes de la conversación que tuvimos”.
Sobre el ecuatoriano Billy Arce señaló: “Hay dos cosas que son totalmente distintas, primero que yo haya recomendado, porque recomendar es una cosa, y segundo que yo haya respondido a una pregunta sobre sus condiciones. Me preguntaron y yo di mi punto de vista, di pro y contras porque lo conocía de tenerlo en Barcelona de Ecuador. Billy me escribió hace una semana para agradecerme lo que habíamos hablado con él porque es un chico que necesita mucho apoyo. No encontró cómo insertarse en el fútbol uruguayo, le costaba muchísimo”.
LOS LATERALES
A la hora de hablar de los laterales, el extécnico aurinegro reveló que sacó a Juan Manuel Ramos porque no lo iba a tener en cuenta en 2023.
“Nosotros estábamos haciendo el plantel para el torneo que viene y Ramos era un jugador que no teníamos en cuenta para lo que venía a futuro. Habíamos puesto a Valentín luego de la lesión que había tenido, volvió de buena manera y luego se desgarró”.
Consultado sobre si se había demorado el debut de Pedro Milans, el técnico expresó: “Yo creo que cuando vos venís de otro equipo y no sos del riñón de Peñarol, primero tenés que adaptarte al club, a la presión, a la gente que está en el campo. Teníamos claro que era un jugador interesante. En esos momentos, nosotros intentamos con el Vasco (Aguirregaray) cuidarlo porque era objeto de mucha agresión verbal y decidimos que ese era el momento de Pedro”.
LA RELACIÓN CON BENGOECHEA
Cuando se le preguntó por su vínculo con el área deportiva que conducen Pablo Bengoechea y Gabriel Cedrés, el entrenador expresó.
“Mi relación con Pablo fue siempre buena, estuvimos a la orden el uno para el otro. Las charlas eran por la mañana, del día a día en el club, de la organización para las vacaciones, de las contrataciones. Pero las decisiones siempre las tomé yo a nivel entrenador. El que arma el equipo soy yo y si hubiese habido alguna cosa que me hubiesen dicho no lo hubiese aceptado. Con él y con Cedrés tuve una muy buena relación”.
Ramos dijo que “era bravo” ponerse la camiseta de Peñarol. “El plantel venía de siete meses de recibir palo y palo constantemente y eso te va desgastando”.
LA ELIMINACIÓN CON LA LUZ Y EL FINAL
Ramos definió de “increíble” lo que le pasó a Peñarol en las semifinales de la Copa AUF Uruguay contra La Luz.
“La verdad fue increíble y hasta el día de hoy no lo puedo creer, sobre todo porque después se echó leña por algunas declaraciones que fueron mentira, eso de que entrenamos penales. No necesita un entrenador (Julio Fuentes) tirar leña al fuego porque somos colegas y yo no lo haría. En ningún momento nosotros entrenamos los penales. Mi discurso era quedar en la historia del club con otro torneo nuevo. Nos cayó como un balde de agua fría perder como perdimos”.
Y concluyó diciendo: “No me arrepentí de tomar Peñarol, porque ellos querían que el contrato fuera sí o sí de un año y medio con la opción de terminar este torneo y armar el otro, y eso es lo que más bronca me da. Yo sabía que tenía que terminar el torneo con el plantel que no había armado y luego armar para el año que viene el plantel a mi gusto. Yo ya tenía una lista como de 6 o 7 jugadores por posición. Ellos me pidieron reiteradas veces la lista de los que no iban a continuar y me pareció ético no presentarla hasta el final del torneo. Nos vamos por la puerta de atrás cuando de parte del club querían pasar este torneo y armar un equipo nuevo. Me cuesta digerirlo”.