Peñarol tiene un duro camino por delante. A nivel local no se puede permitir errores en la disputa del Torneo Intermedio para no perder pisada en la Tabla Anual. Y en el horizonte lo espera un inicio complejo para el inicio de la segunda parte de la temporada, allí donde el clásico del Clausura le cae en medio de los partidos de octavos de final de la Copa CONMEBOL Libertadores.
Si se respeta el calendario de la actividad local, el inicio del Torneo Clausura está previsto para el fin de semana del 8 y 9 de agosto. Peñarol debutará frente a Progreso en el Campeón del Siglo.
A los pocos días (entre el 12 y el 14 de agosto) jugará el partido de ida de los octavos de final de la CONMEBOL Libertadores -con rival a definir en el sorteo del lunes 2 de junio- en el Campeón del Siglo.
De inmediato los aurinegros tendrán que cambiar el chip para volver a meterse en el Clausura ya que el domingo 17 de agosto jugarán el clásico ante Nacional por la segunda fecha del Clausura.
Culminado el clásico Peñarol tiene que viajar al exterior para disputar la revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores que se jugarán entre el 19 y el 21 de agosto.
A su regreso, los carboneros tendrán que ir a Florida para jugar ante Boston River por la tercera fecha del Clausura.
A diferencia del año pasado, donde la obtención del Apertura y la ventaja que sacó en la Tabla Anual le permitían al técnico apelar a un equipo alternativo para los partidos del Clausura, ahora no puede pestañear porque perdió el primer torneo del año y está a cuatro puntos de Nacional que lidera la Anual.