ROMA (AP) -- Carlos Moyá dictó el domingo una clase magistral de tenis al ganar la final del Abierto de Italia con una contundente victoria 6-3, 6-3, 6-1 sobre el argentino David Nalbandian.
Fue un choque entre dos de los principales exponentes de la Legión argentina y de la Armada española.
El español Moyá hizo valer su gran momento, en una temporada en la que ahora suma tres títulos y 32 triunfos. También se transformó en el sexto español que se consagra campeón en el Foro Itálico.
Moyá (sexto preclasificado) empleó una hora y 43 minutos para derrotar al argentino (5) y ganó por primera vez --en su noveno intento-- el torneo romano por la Serie Masters, que repartió 2,45 millones de dólares en premios.
El ex número uno del mundo se afirmó con solidez en el fondo, con buenas devoluciones y tuvo siempre el partido en sus manos, un duelo menos tenso y menos dramático de lo que se preveía.
Moyá fue siempre más agresivo y demostró una buena variedad en su juego ante un impotente Nalbandian.
El argentino, al parece cansado tras su victoria en tres sets ante el español Albert Costa en las semifinales, se vio menos seguro que en los partidos anteriores y sacó su conocida garra solo en el segundo set, cuando estuvo a punto de cambiar a su favor un 5-1 en contra, pero no lo logró.
Nalbandian se midió por cuarta vez con Moyá, al que superaba por 2-1 en el historial.
Moyá ganó el primer set en 36 minutos, tras haberle quebrado el servicio a Nalbandian en el quinto game.
En el segundo set, Moyá le rompió de inmediato el servicio al argentino, con un último y decisivo punto en que le cortó la pelota, la pegó cerca a la red, a donde no alcanzó a llegar Nalbandian.
En el quinto game, le volvió a quebrar el servicio y pasó a un cómodo 4-1. Nalbandian recuperó de inmediato una de las ventajas, al quebrarle el saque a Moyá y quedar 4-2.
Pero al final, en el 5-2, el español le devolvió el favor y ganó el set en 37 minutos.
En la tercera manga, Moyá le rompió el servicio en el primer servicio de Nabaldian, tras haber ganado el suyo, y se puso de inmediato adelante 2-0.
Le quebró de nuevo en el cuarto game y pasó 4-0, ya con el argentino entregado a su suerte, y con Moyá realizando jugadas de prestidigitador.
Moyá recibió un premio de 475.000 dólares, mientras que Nalbandian cobró la mitad de esa cifra.