NUEVA YORK -- Durante su niñez en Palm Bay, Florida, Chris Heston siempre se planteaba la imaginación de un no hitter.
Y cuando el lanzador novato de los Gigantes de San Francisco finalizó el último out de la victoria 5-0 la noche del martes contra los Mets de Nueva York en Citi Field, simplemente no sabía hacia donde dirigirse en el terreno tras haber ponchado al panameño Rubén Tejada.
Exaltado, Heston entonces tomó varios pasos en dirección del dugout de los visitantes, se detuvo e hizo un puño, dándole al centro de su guante antes de recibir un abrazo de su receptor Buster Posey, quien ya estaba acostumbrado a celebrar estos hitos memorables.
“Fue un momento muy emocionante. Definitivamente algo que recordaré para siempre. Yo no estaba muy seguro de a dónde ir después del último out”, afirmaba Heston, quien estuvo sentado entre Posey y su dirigente Bruce Bochy durante la rueda de prensa.
“Sólo sé cuando me di la vuelta y le di un abrazo a Buster”, señaló Heston, quien ponchó a 11 batedores a pesar de que le pegó un pelotazo a tres. “Fue emocionante, pero sólo para ser una parte de esto y tener la oportunidad de estar allí, estoy muy bendecido. Fue muy divertido”.
Heston (6-4), quien inscribió su nombre para siempre en la historia de las Grandes Ligas, lanzó el primer no hitter de la campaña 2015 en la mayores y el cuarto en cuatro años consecutivos para los Gigantes.
El serpentinero de 27 años de edad, quien ha llenado el vacío en la rotación de San Francisco creado por la lesión de Matt Cain, tiró el decimoséptimo juego sin hit en la historia de los Gigantes.
Cain lanzó el suyo, un juego perfecto el 13 de junio de 2012, contra los Astros de Houston en AT&T Ballpark. Tim Lincecum entonces se unió al club, lanzando un no-hitter el 13 de julio de 2013 contra los Padres de San Diego en Petco Park y de nuevo repitiendo la historia contra San Diego el 25 de junio de 2014 ante la afición local.
El quinto lanzador de la rotación mezcló su recta, que apenas sobrepasaba las 90 millas por hora, con una serie de sinkers, cambios y curvas.
Heston retiró a los primeros 10 bateadores del juego antes de golpear a Tejada con el primer lanzamiento del turno en la parte baja de la cuarta entrada. Luego de lanzarle un bola fuera de la zona de strike a Lucas Duda, Heston rozó el pantalón del inicialista de la novena neoyorquina, colocando corredores en primera y segunda.
No obstante, el lanzador derecho retiró a Michael Cuddyer con una doble matanza para salir ileso del episodio.
Heston continuó su dominio sobre los lideres de la División Este de la Liga Nacional, retirando a los próximos 12 bateadores y obtuvo el tercer out de la octava entrada con una rola bateada por Eric Campbell que el torpedero Brandon Crawford atrapó de revés antes de hacer un buen tiro a la inicial.
“Fue duro. Para estar seguro, no fue fácil. Creo que probablemente fue la jugada más difícil del juego, siquiera”, aseveró Crawford, quien había sido el campocorto en los últimos cuatro no-hitters de los Gigantes.
“Parecía que fue un no-hitter bastante fácil, que es bastante difícil de hacer. Por lo general hay una jugada bastante difícil que salva un hit o tal vez algunas línea duras que son bateadas directamente a alguien”.
Heston inició la novena entrada dándole un pelotazo a Anthony Recker antes de ponchar a sus últimos tres bateadores.
“No lanzó duro pero sus lanzamientos tuvieron un montón de movimiento”, dijo el veterano de los Mets, Michael Cuddyer, quien bateó de 3-0.
Su última apertura, que se produjo el pasado 2 de junio contra los Piratas de Pittsburgh, reflejó una persona totalmente diferente a aquella que hizo historia ante 23,155 aficionados, entre ellos unos cuantos miles de fanáticos de los Gigantes que asistieron el primer partido de una serie de tres juegos.
En aquella derrota contra Pittsburgh, Heston batalló, permitiendo cinco carreras, siete imparables y otorgó tres boletos en tres entradas y dos tercios.
Como los pitchers veteranos que lo rodean en la rotación, el novato rápidamente pasó a otro capítulo de cara a su decimotercera apertura que se aproximaba.
“Honestamente, sólo creo que es una cuestión de que él sólo (está haciendo) un poco para encontrar su camino en este momento. Todavía es temprano en su carrera (y está tratando) establecerse en el tipo de lanzador que va a ser”, afirmó Posey. “Es algo que todos pasamos por primera vez cuando llegamos aquí y tratamos de encontrar la manera de ser coherentes. Creo que ese es el reto para todos los jugadores de Grandes Ligas, y Chris ha demostrado que puede hacer ajustes”.
Para Heston, esta hazaña, que pocos lanzadores ha logrado en las mayores, supera a cualquier otra éxito que ha logrado en su vida.
“Tiene que ser número uno. Probablemente justo al lado de haber tenido mi primera aparición las mayores”, dijo la estrella de la noche, que además conectó dos hits incluyendo un sencillo que remolcó dos carreras en la parte alta de la cuarta entrada que aumentó la ventaja 3-0.
Reclutado de Seminole Community College en la duodécima ronda del sorteo de 2009 por San Francisco, Heston debutó el pasado 13 de septiembre de 2014, lanzando una entrada contra los Dodgers de Los Ángeles.
A pesar de un buen desempeño en los entrenamientos primaverales, limitando a los bateadores rivales a un promedio de .192 y acumulando una efectividad de 2.40 en cinco partidos, incluyendo dos aperturas, San Francisco lo envió al campamento de Ligas Menores.
“Pero me encantó la forma en que lanzó la pelota esta primavera y probablemente ganó un lugar en el equipo”, dijo Bochy. “Simplemente no teníamos un lugar. Tienes que tener profundidad. Él realmente lanzó bien el año pasado”.
Sin embargo, debido a la baja de Cain, quien sufrió una lesión en su antebrazo derecho en julio de 2014 y actualmente se encuentra cumpliendo un programa de rehabilitación en las menores, los Gigantes tuvieron una necesidad para un lanzador en el tercer partido del calendario de la temporada regular.
Heston entonces le ganó a Arizona en su segunda apertura de su carrera el pasado 8 de abril, estableciéndose como una figura clave de la rotación.
“Sabía lo que teñía hacer. Sólo tienes que salir y lanzar. Ese tipo de cosas sucede. Está fuera de tu control”, sentenció. “Cuando eso sucede, el enfoque es nada más que pitchar para estar aquí de nuevo”.