BUENOS AIRES -- Como es habitual, en ESPNtenis.com repasamos las historias paralelas de la semana tenística. Detalles, curiosidades, frases destacadas y todo el color del circuito.
Mi amigo Tommy
Entre tanto triunfo y logro personal, la rusa Maria Sharapova se tomó unos minutos para elogiar lo hecho por el alemán Tommy Haas, que en Miami tumbó a Novak Djokovic y llegó hasta las semifinales. "Estoy muy contenta por él. Nos conocemos mucho". ¿De donde viene el vínculo? Ambos residen en Bradenton (Florida), se entrenan en la renombrada Academia Bollettieri y un ex coach de Haas (Thomas Hogstedt) es ahora parte del equipo de Sharapova. Combo suficiente para que la rusa y el alemán compartieran tiempo fuera del circuito.
"Solemos practicar mucho cada vez que coincidimos en Florida o en California. De hecho pasamos varias semanas entrenando en Bradenton, en diciembre pasado. Recuerdo que hace cosa de un año y medio él estaba algo lento en la cancha: falto de confianza, se movía mal...recién volvía de sus problemas de rodilla y después en la cadera. Desde entonces he visto todo su progreso en este tiempo y la verdad es que es increíble lo que consiguió", contó la N°2 del mundo. "Fue siempre un gran compañero de entrenamiento. Ahora quizás resulte algo más caro. Tendré que preguntarle", cerró entre risas.
Tommy devolvió los elogios: "Yo ya la veía entrenar en la Academia cuando tenía siete años. Hay cosas que no se olvidan y Maria ya a esa edad dominaba este deporte". Asimismo, constató que ambos pasaron por un proceso parecido, combatiendo lesiones y luchando por volver a los primeros planos: "Cuando le pasó lo del hombro me acuerdo que me preguntaba a qué doctor había visitado yo. Creo que en definitiva tuvo la misma cirugía que yo y con el mismo médico. Después de algo así lleva mucho tiempo retomar la confianza. A ella le pasó. Creyó que no volvería a ser la misma, sufría mucho con el saque. Pero es una profesional dentro y fuera de la cancha y hoy está jugando de nuevo a un nivel increíble. Además, haber ganado Roland Garros fue espectacular para ella y su equipo. Obviamente sigo su carrera y me pone muy contento lo que está logrando".
Serena vs. Serena
La menor de las Williams es una fiel abonada a este espacio. Lejos de la timidez o la introversión, la N°1 del mundo suele revelar detalles de su vida dentro y fuera de la pista con una soltura muy carismática. Esta vez, la norteamericana confesó qué pasa por su cabeza durante el desarrollo de un partido. Y la anécdota tuvo su sello: "Hablo conmigo misma constantemente. Discuto sola. Parezco una loca".
"Me hablo para adentro y es como que otra Serena me contesta. Primero le doy energía, después le digo que apesta; "ella" me pide que me calle. Nos peleamos un poco en la cancha, pero después nos arreglamos", contó tras vencer a Cibulkova en octavos de final. En cuartos, el "reclamo" fue puntual: "Basta de hacer dobles faltas. Es vergonzoso y poco profesional". En la definición ante Sharapova, también hubo tiempo para el reproche: "¿De verdad vas a llegar a la final para jugar así?". Afortunadamente para ella, la catársis suele tener en casi todos los casos un resultado positivo y Miami no fue la excepción. Serena y Serena, otra vez campeonas.
El incansable Isner
Ya han pasado dos años y medio de aquel inolvidable 70-68 en Wimbledon 2010, pero John Isner sigue haciendo correr el reloj dentro de una cancha de tenis. El estadounidense sabe que su juego tiene un plan a largo plazo y no lo estigmatiza: "Nunca me van a ver ganar 6-1 y 6-0, como hizo Djokovic el otro día. Sencillamente no", ilustró en Miami. Por eso, no sorprende que en 287 partidos haya jugado 262 tiebreaks; sí, casi uno por partido (0.91).
El gigante norteamericano (mide 2.06 metros) ha disputado más desempates que jugadores con el doble de partidos en el circuito, como Djokovic (613 y 223), Nadal (723 y 239) y Murray (523 y 190). Solo siete tenistas en actividad lo superan en ese rubro: Haas (803 y 334), Federer (1093 y 507), Feliciano López (596 y 352), Hewitt (798 y 297), Youzhny (701 y 290), Stepanek (580 y 266) y Karlovic (415 y 442). No hay error, el croata tiene más tiebreaks que partidos jugados y, claro, es el único que supera a Isner en promedio (1.07).
La diferencia que resalta en la estadística del estadounidense es el porcentaje de tiebreaks ganados: 65% en su carrera (solo por debajo de Federer) y 72% en el último año (la ATP tiene en cuenta las últimas 52 semanas); más que nadie. En efecto, a Miami llegó con un récord de 8-0 en 2013 y fue Cilic el que se encargó de romper la racha. "Ciertamente he jugado demasiados. Y la verdad es que por alguna razón allí suele verse mi mejor tenis. Ojalá pudiera jugar así durante el partido...", consideró el ahora N°23 del mundo.
Otra polémica con el público brasileño en Estados Unidos
Allá por febrero de este año, por la primera ronda de la Copa Davis, los miembros del equipo norteamericano, con los hermanos Bryan y John Isner a la cabeza, criticaron duramente a los fanáticos brasileños por la "bulla" generada en la serie disputada en Jacksonville. "No tuvieron nada de clase", protestaba el potente singlista. A varios kilómetros de allí, el clima copero de los brasileños volvió a decir presente en Estados Unidos: fue en el duelo entre Thomaz Bellucci y el polaco Jerzy Janowicz, en Miami, torneo con muchísima presencia latinoamericana en las gradas. El finalista del último Masters de París se mostró desde el primer momento muy molesto con el griterío del público brasileño ("el 80% del total", según proyectaría luego) y, tras procesar la bronca de la derrota por unos días, hizo su descargo en su página de Facebook:
"En cuanto pisé la pista me empezaron a gritar "Poland go home"; silbaban cada vez que le mostraba la marca de un pique al umpire; aplaudían y ondeaban sus banderas ante cada saque fallado...". "En un momento del primer set cuando paré para atarme los cordones empezaron a gritar y a silbar. De haber sabido que era tanto problema hubiera pedido un par de zapatillas con velcro", bromeó. "Mis discusiones con el juez de línea eran solo por el público -continuó-. Yo tolero cualquier cosa, pero cuando me empezaron a insultar en ruso decidí que era demasiado. Incluso mi coach, que es considerado "un oasis de paz" estalló y discutió con algunas personas que lo insultaban y le hacían gestos. Hasta el coach de Bellucci intervino varias veces y trató de calmar a la gente". Además, el polaco se mostró molesto por las versiones que indicaban que había agredido verbalmente a un ball boy y disparó: "Entiendo que me hayan criticado después de lo que pasó en Australia. Pero eso que se dice es algo deplorable y lejos está de la verdad".
Estilo Haas
Otra historia paralela que dejó el paso del alemán por Miami tuvo que ver con su vestimenta, tan sencilla como heterogénea. Sucede que, por extraño que parezca, Haas no tiene actualmente contrato con una línea de ropa, entonces mezcla colores, marcas, modelos. "Cuando se trata de combinar prendas soy patético", bromeó ante la prensa en Key Biscayne. "A veces me miro al espejo antes de salir a la cancha y me digo: "Dios, ¿en qué estaba pensando?"", agregó con humor. "Tal vez si tuviera un contrato firmado sería diferente; pero de esta manera simplemente me pongo lo que me gusta y me sienta cómodo", explicó. Lo que lo sigue acompañando es la gorrita con visera hacia atrás; casi una marca registrada: "Mi pelo es lo suficientemente corto como para jugar sin una, pero ya es rutina...". ¿Cambiará su situación tras la gran semana en Miami?
La batalla de las superficies
Más de una vez Rafael Nadal se quejó públicamente de la vasta cantidad de torneos sobre canchas duras que pueblan el calendario de la ATP, argumentando que "son agresivas para el organismo". "En las próximas generaciones algo tendrá que cambiar", desafiaba el español.
Quien se sumó al debate en Miami fue Andy Murray. El escocés también consideró positivo un cambio en el calendario, pero con un sello particular: "Debería alargarse la temporada de pasto; creo que una mayor variedad en las superficies le haría mejor al juego. Aparte de acortar los rallies y beneficiar la salud de los jugadores". Curiosamente, a pocos días de lo afirmado por el ahora N°2 del mundo, se anunció que el ATP de Stuttgart dejaría el polvo de ladrillo por el césped, estirando a tres semanas la preparación para Wimbledon.
Además, el británico resaltó que hoy no toda pista dura implica que sea rápida y marcó la diferencia entre Indian Wells y Miami: "Las de Indian Wells son extremadamente lentas; es muy complicado jugar allí, porque la pelota viaja muy rápido por el aire, pero cuando pica se frena, se detiene. Aquí [por Miami] eso no pasa; se juega más rápido".
Tenis y redes sociales
Hace unos meses, en octubre para ser más precisos, se dio una particular -y hasta bizarra- situación en la Fórmula 1 de automovilismo. Lewis Hamilton se enfadó con, el por entonces compañero de equipo en McLaren, Jenson Button porque no lo seguía en twitter. Sí, leyó bien. Y en Miami hubo un caso similar, pero tomado como debe ser. La estadounidense Lisa Raymond y la británica Laura Robson, de gran desempeño como dupla en Key Biscayne, fueron alertadas de que, si bien ambas tenían buena actividad en la red social, no se seguían una a la otra.
Rápida de reflejos, Robson destacó que eso se iba a solucionar de inmediato, a lo que, continuando la humorada, Raymond quiso poner su experiencia en cancha y, con 20 años más que su pareja de dobles, le sugirió que la siguiera. No tardó la respuesta. "Él acaba de decir que vos tampoco me seguís, eh", replicó la británica, robándose más sonrisas. ¿Cómo terminó todo? Con final feliz. Ahora Raymond y Robson se siguen en twitter.