EAST RUTHERFORD -- Después de la más reciente lesión de Andre Brown --una fractura en la pierna izquierda, sufrida ante los New York Giants en el cierre de pretemporada el pasado jueves por la noche ante los New England Patriots-- el corredor David Wilson está preparado para la carga. Acarreos de tercera oportunidad, acarreos de línea de gol... lo que sea que le den, Wilson lo quiere.
"Estoy en forma, así que creo que puedo con la carga", dijo el corredor de segundo año. "Lo que sea que me pidan que haga, lo haré. Si necesitan que pateé un gol de campo, voy a salir allá y pondré el 100 por ciento y trataré de convertir ese gol de campo".
Es improbable que necesiten eso, pero Wilson podría recibir significativamente más toques por el tiempo que esté fuera Brown. Brown era el corredor de línea de gol el año pasado, registrando ocho touchdowns en apenas 10 encuentros antes de que una fractura de pierna más severa acabara prematuramente con su campaña, y estaba siendo proyectado para ese rol nuevamente este año. Pero esa asignación tenía que ver más con lo bueno que era Brown, que con alguna provocación sobre la habilidad de Wilson de lidiar con la carga en la línea de gol.
"David Wilson, corre duro ahí dentro", dijo el entrenador en jefe de los Giants, Tom Coughlin. "Es poderoso. Es compacto. Tiene tremenda fuerza en las piernas. Así que el hecho de que corta el balón en situaciones de corto yardaje, no tengo problemas con ello".
Es verdad que la velocidad eléctrica de Wilson y su estatura relativamente corta (está listado en 5 pies con 9 pulgadas y 205 libras) contribuyen a una reputación de que es un jugador fino. Pero cuando lo miras correr entre los tackles, es sencillo ver que corre con poder.
"No se confundan por mi tamaño", dijo Wilson. "Soy un tipo físico. Soy de la provincia. Crecí cortando leña. Estoy bien armado".
Eso no debe ser un problema. Lo más importante es que Brown era el corredor que empleaban los Giants en terceras oportunidades y en situaciones críticas de protección de pase. La salida de Ahmad Bradshaw, quien ranquea como uno de los mejores corredores en situaciones de protección de pase en la liga, ha creado un vacío en esa área, y parecía que los entrenadores de los Giants estaban más cómodos con Brown bloqueando las cargas que con Wilson.
Pero Wilson hizo un trabajo decente el pasado jueves por la noche, bloqueando a un profundo de los Patriots en una carga que resultó en una jugada de pase de 37 yardas de Eli Manning a Louis Murphy, y dijo sentirse considerablemente más cómodo con los esquemas de protección de lo que se sentía hace un año, o incluso hace un mes. Ha estado mirando videos de Bradshaw y aplicando lecciones que Bradshaw y Brown han tratado de enseñarle sobre el bloqueo en las cargas a lo largo del último año.
"Ha hecho un buen trabajo de eso", dijo Coughlin. "El último par de partidos, ha mejorado. Es un jugador que ha progresado, mucho más consciente de lo que debe hacer para contribuir en el esquema de protección de pase".
Coughlin sí dijo que deseaban monitorear las jugadas de Wilson, y que hay un número en mente para él que no va a cambiar sólo por la lesión de Brown. Pero es posible que los Giants podrían moverse a un esquema de "caballito de poder", con Wilson recibiendo la mayoría de acarreos mientras que reservas como Da'Rel Scott y Michael Cox contribuyen mientras recibe un descanso. Coughlin también dijo que el equipo espera resultados médicos sobre Brown para determinar cuánto tiempo estará fuera.
Mientras tanto, Wilson está bien con lo que sea que le pidan. Incluso, tampoco le molestaría que le volvieran a dar las tareas de regreso de patadas de salida en que fue tan explosivo hace un año.
"Seguimos esperando el veredicto", dijo Wilson. "Michael Cox ha estado haciendo un bien trabajo con ello, así que veremos. Todavía lo quiero, pero si alguien como él va a aprovecharse de esto, está bien, también".