Gloucester se impuso como local ante Benetton por 40 a 23 y jugará ante Sharks, que venció con lo justo a Clermont por 32-21, la final de la Challenge Cup el próximo 24 de mayo en el Estadio de Tottenham Hotspur en Londres. Mirá el certamen en Star+.
GLOUCESTER 40-23 BENETTON
En un primer tiempo parejo, fue el local el que pudo sacar la ventaja. Sólo tardó seis minutos para que Josh Hathaway abriera el marcador en el Kingsholm Stadium. Pero la visita, que tuvo la presencia argentina de Thomas Gallo, Tomás Albornoz, Juan Ignacio Brex e Ignacio Mendy, se puso en partido con dos penales del apertura tucumano (aportó ocho puntos). Si bien Gloucester consiguió estirar la ventaja con el primera línea Seb Blake, en la última jugada de la etapa inicial, Rhyno Smith facturó para irse al descanso 11-15 abajo.
En el complemento, Santiago Socino ingresó por Mayco Vivas en los Cherry & Whites y fue muy importante en la faceta ofensiva. Si bien los italianos se acercaron con un try de Gianmarco Lucchesi, autor luego de un doblete, el conjunto inglés sacó ventaja con las conquistas de Adam Hastings (sumó diez unidades con el pie), Freddie Clarke y Ollie Thorley para meterse en la final. Cabe destacar que en el cierre del encuentro, Gallo debió salir por un golpe.
SHARKS 32-31 CLERMONT
Le sacó el triunfo de las manos y la indisciplina de la primera etapa fue clave para que pueda seguir en partido. Corrió siempre de atrás y lo ganó con jerarquía pese a estar 13 puntos abajo. La primera etapa fue todo de los franceses, que contaron con Tomás Lavanini, Marcos Kremer y Bautista Delguy (amonestado) de titulares. Con dos tries de Joris Jurand y otro de Alex Newsone, los galos sacaron una buena ventaja, pero pecaron en la conducta y Siya Masuku acertó seis penales a los palos para el elenco sudafricano. Anthony Belleau no quiso ser menos y aportó dos en el epílogo para dejar el parcial 28-18 favorable a los amarillos.
Al inicio del complemento, otro penal de Belleau estiró la diferencia a 13 puntos, pero los tiburones fueron pacientes y dieron vuelta el partido. Un try de Vincent Koch a lo guapo en el centímetro final y otro de Makazole Mapimpi, después de la descomunal pelota que ganó en el aire Etzebeth, dejaron a Siya Masuku y su pie al borde del triunfo con la conversión. Los diez minutos restantes fueron un monólogo de Clermont por torcer el destino, pero ya era tarde, Sharks ya tenía en la mano el pasaje a la final.